Buenas
Quería romper una lanza a favor de Manolito.
Manolito, sonrosado y regordete, nació con una enfermedad terminal; la de cancelación o conclusión. La matrona, consternada, le dió X meses de vida.
Hoy.
Gracias al Dr. Julián y demas enfermeros, Manolito no solo goza de buena salud, sino que, como cualquier otra persona, no tiene una fecha límite suspendida sobre su cabeza.
Hoy Manolito vive feliz, sorprendiéndonos cada semana, pidiendo poco de paga y dándonos muchas alegrias.
Y yo me paso mucho, sí. Y soy rebuscado, también. Pero es que la reflexión lo merece.
Un aplauso enorme, este,
, para la manera en que habéis llevado y llevais el coleccionable,
Julián, por hacer de él algo realmente especial, algo diferente, por haber hecho bien vuestro trabajo y haber captado el interes del público, con material atractivo y a buen precio, en un formato que ha sido todo un descubrimiento.
Esto no es más que mi negativa a quienes señalan como un error el que aún no se sepa el número definitivo de entregas o contenidos. Hecho que ha demostrado sobradamente su razón de ser, por más que nosotros sigamos dando la tabarra preguntando (y lo que nos queda
).
Nunca volveré a llamarlo "Coleccionable".
No lo llames coleccionable. Llámalo Manolito. Manolito no tiene anunciado su final, y ni siquiera tiene anunciada su programación completa. Y lo más cachondo es que un montón de gente está enganchado a Manolito, preguntándose qué hará a continuación, mientras que nadie se acuerda de esos coleccionables con un número público de entregas que se anunciaron al mismo tiempo que Manolito.