Pues mira que me gusta Byrne, pero a mí Actos de Venganza me parece una de las peores ideas que ha tenido el hombre, y encima la coordinación editorial para hacer el crossover fue pésima (aquí pienso que Byrne no tuvo toda la culpa de ésto).
Dejando aparte que la premisa es absurda, que un grupo de mentes maestras criminales organicen enfrentamientos de villanos secundarios con superhéroes que no son sus contrincantes habituales. Este tipo de enfrentamientos ya se producen de tanto en tanto sin necesidad de que lo planifique nadie (casi toda la etapa de Roger Stern en Amazing Spider-Man fueron peleas con villanos que no eran propios de Spidey, por ejemplo).
Luego sin contar el hecho de que villanos como Loki, Dr. Muerte o Cráneo Rojo tienen recursos para organizar todo eso, si quisieran, sin necesidad de aliarse con nadie.
Como talón de aquiles del grupo de villanos principales se elige al Mago, al que dejan participar dentro del cónclave que habían organizado. Esto no tiene ningún sentido, ya que se trata de un villano menor, con recursos mucho más limitados que los otros, y que encima estaba encerrado en la Bóveda... Genios científicos como él los hay a patadas: MODOK, El Pensador, el Amo del Mundo, el Dr. Octopus.... Un candidato más idóneo hubiera sido El Líder, un villano con más recursos y que nunca había sido capturado. (Eso sí, en Factor-X se nos muestra que Loki intenta fichar a Apocalipsis, pero éste rechaza la oferta).
Y por último, en esta ocasión a Byrne sí le falla la caracterización porque obvió inicialmente el hecho de que muchos de estos grandes villanos son enemigos entre sí (como se vió precisamente hace años en SuperVillain Team Up): Cráneo Rojo, Magneto y Dr. Muerte están enfrentados mutuamente; es muy improbable que Kingpin quisiera colaborar con estas amenazas implicándose personalmente, etc... Que sí, al final acabaron todos a tortas, pero no tiene sentido esa "tregua" que firman inicialmente para acometer un cutreplan que cualquiera de ellos podría haber realizado en solitario.