En mi entorno, la gente está a favor de estas políticas de cancelación, así es que... ya estoy curado de espanto.
De estar jugando a un juego de mesa (el Catán o alguno de esos), que un amigo hace un comentario y otro le dice "eso no se puede decir".
Bueno, de esto y de cosas como "hay que combatir el cambio climático, así que no me importa pagar más por la luz" o "pues a mí no me importaría estar con un hombre que antes era una mujer".
Debo decir, eso sí, que esto es así principalmente entre las mujeres. Al menos, esa es mi experiencia.
En el mío no... con gente de mi generación, que decimos burradas aunque realmente no las pensemos ni comulguemos con ellas. Pero claro, las decimos en un entorno en el que sabemos que nadie se va a ofender y la gracia en sí es soltar la burrada, porque obviamente no nos las creemos. Con generaciones actuales ya la cosa cambia.
Me han llegado a decir que el cine de evasión (acción, terror, etc.) tiene que ser "educativo", que el porno está mal, que hablar/escribir/cantar sobre ciertas figuras históricas es de fascistas (personajes de mucho antes de que se "inventase" el fascismo), que no hay que separar autor y obra, que no querer acostarse con una mujer trans es transfobia, que la concepción biológica de mujer no es la correcta, que cualquiera que se sienta una mujer es mujer, etc, etc.
Tampoco son todos, pero hay gente así. Muchos de estos temas son debatibles, pero suelen ser muy inflexibles con sus posturas.
Además, en muchos casos parecen cosas importadas desde Estados Unidos.