Jim Lee, uno de los principales impulsores de una tendencia que aún hoy no ha desaparecido y que ha contribuido como pocas a la perversión del género: la de dibujar a todos los personajes masculinos con el mismo cuerpo hipertrofiado al cubo como si fueran candidatos a Mister Olimpia y a las mujeres como pornostars recauchutadas. Encima todos iguales, casi sin distinguirse en proporciones, formas...
Además de eso, como narrador es mediocre, sus diseños clónicos y horteras, gusto por el postureo barato, incluso en mitad de escenas introspectivas o dramáticas... Pero bueno, su trazo no es malo del todo y quizás ha mejorado en los últimos tiempos, no he seguido su trabajo.
Lo mejor que ha hecho, alguna portada de Uncanny está bien, especialmente las que cuentan algo. Luego otras como las del X-Men 1 son grimosas.