Pero si me parece genial que os gusten muchísimo 20 años de Coppola, y no discuto su importancia para el cine, pero a mí solo me gustan de verdad, de gustarme mucho esas 3 pelis. Que le voy a hacer. Otro gigante con el que casi nunca acabo de conectar es Hitchcock, y eso no quiere decir que no lo metiese en un top 10 histórico de directores a nivel mundial (en el cual no se si metería a Coppola)
En el lado opuesto de esa generación 70s está Scorsese, me gusta de manera estúpida y casi acrítica prácticamente todo lo que hace, incluso a día de hoy. 
No, ya, si gustos, colores, eso ya es cada uno y tenemos nuestras filias y fobias, más allá del tema objetivo donde como decía, es que Coppola es un bicharraco de los que no hay dos iguales y que tampoco tienen mucho sentido debatir.
Luego hay gente que no entiende a Lynch, que De Sica le parece lento, que no le atrae Lumet, directores o películas que no les entran y ya está... cada cual con su cruz

En el lado opuesto de esa generación 70s está Scorsese, me gusta de manera estúpida y casi acrítica prácticamente todo lo que hace, incluso a día de hoy. 
Bueno, en realidad son generación 60, que es cuando empezaron. Y en esos primeros años, cómo sería la cosa (y eso que a mí me pasa igual que a ti con Scorsese, me gusta TODO) que Coppola era el bueno.
Martinete saca ¿Quién llama a mi puerta?, El vagón de Bertha, Malas Calles y Alicia ya no vive aquí en los sesenta, primeros setenta. De todas ellas, estando todas bastante bien (Bertha la más floja), la única que realmente da un paso adelante y presagia un gran realizador es Malas Calles, que es su primera gran-pequeña obra.
Francisquito se presenta en sociedad realmente con Dementia 13, Ya eres un gran chico, El valle del arco iris y Llueve sobre mi corazón, que para mi gusto es la mejor, todo eso en los sesenta.
Aquí todavía estaban empezando y encontrando su voz, pero es que en los setenta, si esto fuera un combate a golpes, la paliza de Coppola en los setenta es tremenda:
Martin saca Taxi Driver (obra capital en su trayectoria) y New York, New York.
Coppola le mete dos derechazos con El Padrino, lo noquea con El Padrino II, remata con La conversación y ya lo destruye con Apocalypse Now.
Un KO en toda regla.
Los 80 de ambos para mí es combate nulo, porque ambos sacan muy buenas cosas, pero ninguna realmente top para lo que ya habían demostrado, quitando Toro Salvaje, que es la mejor película de Martin en los 80, siendo la de Coppola La ley de la calle (me quedo con Toro, claro). De todas formas, Martincito saca cosas realmente interesantes, como Jo, qué noche, el rey de la comedia, la última tentación de Cristo, etc. Todo tabla media en él, pero algunas son pequeñas joyas.
Ya en los 90 Martin se coge justa venganza por la paliza recibida en sus inicios, y le mete una paliza monumental. Coppola saca El Padrino III, con sus consecuentes problemas por comparación, que sin ser mala película, claro, no es ninguna de las otras dos, que es su mayor pecado. Saca Drácula, un peliculón, y ya empiezan los trabajos alimenticios, como Jack o Legítima defensa, muy por debajo de él.
Martin le engancha con Uno de los nuestros, un par de directos de El cabo del miedo (más meme que remake, pero qué gozada), La edad de la inocencia, Kundun y Al límite, que no hacen mucho daño, pero castigan los riñones, y cierra con un uppercut en toda la mandíbula con Casino.
En los 2000, Coppola deja de existir, y Martin sigue en forma. Ya no saca grandes obras maestras como las de antes, pero quitando tropiezos como Gangs, o curiosidades como El aviador (insisto, me gustan todas), cada 4 películas una es un golpe de joven potrillo que desmiente que este hombre se levante 4 veces por la noche para mear. Hablo por supuesto de Infiltrados y El lobo de Wall Street, que para mí son sus dos mayores logros modernos. Shutter Island, Silencio, El irlandés o Los asesinos de la luna son también muy meritorias, pero para mí esas dos están por encima.
Y más o menos, creo que eso sería un retrato acertado de los yayos, en esa convivencia a lo largo de los años como dos de los grandes referentes del cine americano.
70 Coppola.
80 Empate.
90 Martin.
2000 Ya solo queda Martin, Francis, gracias por todo.