Día 285: The (Uncanny) X-Men vol. 1 #123. 17 de abril de 1979
Volvemos, después de una paradita en el camino. Bienvenidos a ¡Mundo Asesino! Con la invitación estelar de cierto trepamuros...
Banda sonora: En 1979, salió el álbum "Entertainment!" de The Gang of Four. Y aunque podría ser más adecuado ese título par ambientar historias de Mojo, Mundo Asesino no va a la zaga. os dejamos con Damaged Goods":
https://www.youtube.com/watch?v=JFU_1h7io0Y
Créditos: Chris Claremont (guion, argumento); John Byrne (dibujo, argumento); Terry Austin (tinta); Tom Orzechowski (rotulación); Glynis Wein (color).
Portada de Terry Austin y Danny Crespi.
Bueno, pues al fin estamos tranquilos ya en la Mansión X, después de tanto viaje, que ya cansaba. Ahora a reposar junto a la chimenea y... ¡pues no! Aquí no se descansa. Siempre hay nuevos peligros que enfrentar, que para eso estamos ante un cómic de superhéroes. Aunque, tal y como comienza la cosa, todo parece ir bien. Scott pasea por NY con Colleen, su nueva seminovia, quien se guarda bien de hablarle de Jean y eso de que está viva y coleando. Mirad cómo se calla cuando Scott le dice que quiere contactar con los padres de Jean.
Spiderman hace bien poco aquí, de momento, excepto saludar y largarse, haciedno honor a su apelativo de amistoso vecino, mientras vemos de fondo a Bonnie Wilford, Chris Claremont y Roger Stern alucinando con una escena que, sin embargo, debía resultarles de lo más familiar. Se supone que en este cómic salen también Byrne, Glynis Wein y Len Wein, pero yo no he podido localizarlos. Comodín del público.
Scott sigue hablándole de Jean a Colleen, de que ella es la única cita que ha tenido junto a Jean y ella pues chitón, entre otras cosas, porque un misterioso camión de la basura atrapa a los héroes con un brazo extensible con forma de fuelle. El ruido alerta a Spiderman, y lo reconoce con el sello inconfundible de Arcade. Vaya oído que tiene Parker, o bueno, asumiremos que el ruido es muy muy característicos de las máquinas de Arcade.
Cuando acude al lugar, el trepamuros solo encuentra el chal de Colleen. Mientras Peter decide investigar por su cuenta, llamando a la Patrulla-X para avisarles de que algo no anda bien. Pero Arcade se mueve rápido, sorprendiendo a Coloso y a Rondador, de cita con Betsy y Amanda. Las dos parejas quedan atrapadas cuando acudían a ver un ballet en el Lincoln Center.
Todo por obra de Ms. Locke, lugarteniente de Arcade, quien engaña a los mutantes haciéndoles creer que acuden al palco privado del pijeras de Xavier, cuando en realidad los mete en un container extraíble que los de Arcade se llevan en helicóptero, tras dormir con gas a los buenos
Ya hay tres hombres X en el bote, y sumando, porque luego vemos a Logan, muy guapete, despidiéndose de Mariko en el consulado de Japón, después de llevarla de cenita, pese a que en episodios anteriores le dieron con la puerta en las narices. Un señor sospechoso con una "A" en la gorra le ofrece fuego.
La "A" va a ser de Arcade ¿no? Pues sí. Y Lobezno es atrapado off-camera, como deduciremos luego. Ahora viajamos hasta la Mansión Xavier, donde es Banshee el que cae a manos del mismo Arcade, de un disparo con un rayo somnífero. Un momento ¿Arcade sabe dónde vive la Patrulla?
Pues ya podría haber cambiado papeles con Magneto, que se tiró buscando el paradero de los mutantes cerca de diez años. Lo que son las cosas. Que por cierto, y por seguir con las anécdotas, parece que el teléfono no ha sido de utilidad de Sean para llamar a Moira. Y Moira, que piensa que Sean está muerto, recordemos, estaba con Jean. Hay que ver la de enredos que se podrían haber deshecho ya. Dejémoslo en que no han logrado contactar con la Isla Muir porque los mutantes estaban celebrando la Navidad en Edimburgo y en la Isla Muir solo está el Mutante X comiéndose a Angus, el intolerante barquero que quería dinamitar la base de Moira.
O lo que quiera que esté haciéndole el mutante ese, que a eso ya llegaremos. De momento, Arcade duerme a dos mutantes de un tiro, aprovechando que el teléfono suena otra vez mientras él ataca por la espalda. El que llamaba, a todo esto, era Spiderman. Para avisar de Arcade, pero se encuentra con que quien está al aparato es el mismo Arcade. Tarde.
Imaginaos la sorpresa del amistoso vecino. Llega a romper la cabina de teléfono y todo de la impotencia. Pero los X-Men ya están empaquetados y listos para Mundo Asesino. Estos despiertan metidos en bolas de un pinball, listos para ser eyectados hacia la muerte.
Las bolas botan en todas direcciones, solo que cada vez que tocan algún tope, reciben descargas eléctricas. Tras ser zarandeados un poco, los mutantes acaban cada uno en un sitio distinto del flipper, donde tendrán que enfrentar diferentes desafíos.
El primero que se muestra es Cíclope. Su prueba es elegir una de las tres puertas. Dos llevan a la muerte. Una a la salvación. Tiene que decidirse aprisa, pues la pared es empujada por un resorte y, si no abre alguna puerta, morirá aplastado.
Los más viejos se acordarán, como yo, de Humor Amarillo. Solo que aquí Scott es bien listo y deduce que Arcade tiene que estar mintiendo y que ninguna puerta es la buena. Así que, pensando out of the box, sale del lugar haciendo un boquete en la pared con sus rayos ópticos.
Estas dos últimas viñetas en realidad suceden después de que veamos como se las apaña el resto, pero están incluidas ahora por agilizar la reseña. Seguimos con Coloso, a quien se le aparece un tal Coronel Vazhin. Vazhin llama traidor a la patria a Piotr.
Mientras el buenazo de Rasputin niega que sea un traidor, es sugestionado por unas luces hipnotiznates que producen un efecto que... en fin, luego lo veremos. Pasamos a Lobezno, quien es atacado por "androides instantáneos" que surgen de las visiones distorsionadas de espejos.
Madre mía cómo pilota Arcade de tecnología. Androides instantáneos. Ríete tú de las impresoras 3D. Saltamos a Kurt, quien tendrá que esquivar a unos coches de choque muy particulares, equipados con motosierras y dientes. Ahí es nada.
¿Y qué diremos del buen Sean Cassidy? Pues que es atacado por aviones nazis. Arcade tiene para todos. Y lo más curioso es que el escenario aparece de la nada. Me pregunto si de aquí tomaría Claremont su idea para crear los hologramas de la Sala de Peligro, que serían un clásico.
Finalmente, Tormenta es atrapada en una superficie cónica, mientras es volteada hacia el agua desde una plataforma. La única forma de salvarse es volar a la punta del cono, donde ve u orificio de salida. Llega cerca de la salida con esfuerzo, pero recibe una descarga eléctrica.
Cuando Cíclope atraviesa la pared para salir de la habitación de las tres puertas, da con la cámara en la que Lobezno se bate con las figuras robóticas deformadas por los espejos. Scott inutiliza el generador de androides al entrar por la pared y dejan de crearse.
Sin embargo, cuando Lobezno estaba ya confiado, recibe un puñetazo de una mano blindada de acero orgánica que nos es muy familiar. Efectivamente, es de Coloso. O era. Porque ahora quien tienen delante es ¡El Proletario! El lavado de cerebro ha tenido éxito en tiempo récord.
Observad también el jeto de Lenin encima de la hoz y el martillo en el uniforme de Peter. Impagable. Mientras, Arcade se parte de la risa, reteniendo presas a Betsy, Amanda y Colleen en prisiones con forma de regalos. Y así acaba este episodio, dejándonos expectantes.
Impresiones. Pues bueno, nunca he sido muy fan de Arcade. Pero hay que reconocer que el número es bastante divertido. Algunos de los recursos tecnológicos de Arcade se me antojan inverosímiles, pero en fin, esto es un tebeo de superhéroes. La aparición de Spiderman tal vez funciona más como reclamo que otra cosa, aunque también sirve de puente para presentar la seriedad de la amenaza de Arcade, ya que Spiderman ya lo conoce desde su aparición en Marvel Team-Up. Y con esto lo dejamos, de momento. Feliz domingo!