No me cansaré de ser un firme defensor de Sólo Dios Perdona (como he dejado claro en alguna otra ocasión
), un interesante aunque imperfecto homenaje al cine de Jodorowsky o Lynch, al mismo tiempo que una película totalmente fiel a la carrera del propio Winding Refn, cuya obra más alejada de su estilo habitual es precisamente Drive.
Supongo que si a alguien no le han gustado anteriores trabajos del danés como Bronson o Valhalla Rising, Only God Forgives tampoco lo hará. Pero es que ese es el cine que Refn siempre ha hecho. Y a mi personalmente me parece muy estimulante precisamente por ser diferente y arriesgado.