Julián, una pregunta (si puedes o quieres contestarla, claro): De entre todos los criterios que la editorial puede (y debe) manejar antes y durante el estudio y planificación de una publicación, ¿qué criterio ha pesado más o se ha considerado más importante a la hora de definir qué materiales van a formar parte de esta nueva línea editorial? Muchas gracias de antemano.
Varios. El primero, que esos materiales estén digitalizados, traducidos y rotulados. De esta forma, abaratamos ya mucho el precio, dado que no hay que incurrir en los gastos derivados de ello, que no son despreciables. Eso a su vez acota las posibilidades a los materiales disponibles de esas características, lo que nos coloca en 1998, en la época de Heroes Return. Por ejemplo, yo quería haber empezado con Onslaught, pero no es posible debido a que no hay materiales digitales. No obstante, si te soy sincero es de lo poco que quiero recuperar de la época anterior a la digitalización. La Marvel de casi todos los noventa es en general floja, y la situación cambia, precisamente, a partir de Heroes Return.
El segundo, que sean materiales comerciales y de calidad que merece la pena recuperar. Aquí se puede flexibilizar mucho más que lo que hacemos a la hora de seleccionar los Marvel Deluxe, ya que el formato está pensado precisamente para dar cabida no sólo a obras muy comerciales (como es el caso de Thor, Capitán América o X-Men), sino también a materiales muy interesantes, de elevada calidad, pero que a lo mejor no son tan megahits como los mencionados. Aquí entramos en cosas como Alias, X-Factor, Exiliados, Spider-Girl, Inhumanos... E incluso cosas de las que NADIE se acuerda pero que merecen recuperarse. Me viene a la cabeza el Cable de Robinson/Casey y José Ladronn, o el Generación X de Faerber y los Dodson.
A partir de ahí, preparamos un largo listado de materiales para tener fondo para la colección, y también para que no se usen para otra cosa, y tenerlos más o menos ordenados. La idea es que iremos alternando cosas eminéntemente comerciales con otras que quizás no lo sean tanto, pero que merezcan mucho la pena. Reserva no falta precisamente. Sólo entre 1998 y 2004 me salen unos sesenta posibles volúmenes, y unos setenta u ochenta de 2004 a la actualidad.
Y sí, le damos muchas vueltas a las cosas y las planificamos mucho antes de materializar, no digamos ya anunciar, algo. Es la manera de no pillarte los dedos.