Al fin y al cabo, el Salón del Cómic no es una reunión de amigos sino un lugar de intercambio "comercial", en el que las editoriales exponen sus productos y buscan en el mercado lo que está disponible; ahí es donde entran los dibujantes profesionales, o los que pretenden serlo, deben mostrar sus trabajos.
Es más, Marvel ya no acepta propuestas de dibujantes directamente, como hacía antaño, sino que tiene un editor especializado en "buscar" por los salones de todo el mundo a gente "nueva" (aunque sólo lo sean para ellos). Su nombre es C. B. Cebulski, es un tipo muy simpático y cercano, y que suele estar en Barcelona todos los años y al que te ganarás si le invitas a comer bien, pues es un gran gourmet...