Es una buena película cuando desarrolla a los personajes, cuando no son sólo clichés sin personalidad (el héroe inseguro, el entrenador severo, el villano malvadísimo, la chica enamorada...), cuando transmite tensión o impacta en el público, cuando no aparecen momentos ilógicos ("Guardianes, que Parallax está en la Tierra, ayudadme", "Joé, ni que fuese asunto nuestro, no nos des la barrila").