Ey
Venenofan, me ha gustado la sorpresa al principio de todo, con Mistica- pero tiene razón
Anne, vas un poquitin rápido... eso si, sigue posteando. Me parece intrigante
Pongo una escena que escribí para un concurso (la idea es agregar una escena sin alterar el curso de X3)...
Alla va:
Escena: Charla
Es tarde por la noche. En una habitación de la mansión, se oyen ruidos de sabanas moviéndose- es Pícara, intentando dormir. Se siente inquieta sin decidirse en que posición quedarse. Sin duda, no puede dormir. Continúa moviéndose de un lado para otro, pero se rinde y se sienta en la cama. Coge el reloj de su mesita de luz, y suspira. Son las 3 de la mañana.
Sale de su habitación con la bata puesta, dirigiéndose hacia el lavabo, pero oye un sonido. No es monótono, más bien rítmico, pero tranquilo. Curiosa por saber de donde proviene, se acerca y a medida que más se acerca, se da cuenta que ese sonido es… música.
Camina por el pasillo, hasta que se detiene delante de una habitación. La sala de música. Se asoma por la puerta, y ve que es Bestia tocando el piano. Escucha atentamente, sin mover un dedo. Bestia parece no haberla escuchado venir, y continúa tocando el piano. Toca las últimas tres notas, y sus manos abandonan el teclado.
Pícara: Ha… sido muy bonito.
Bestia se da la vuelta, sorprendido, y sonríe.
Bestia: Sonata de Claro de Luna. Ludvig Van Beethoven.
Bestia: Perdona que te haya despertado-
Pícara: No, no importa, ya hacía rato que no podía dormir.
Pícara: Parece que no soy la única.
Bestia (sonríe) : Anteriormente, solía venir aquí a pensar… y aún lo hago.
Pausa.
Bestia: ¿Sabes tocar el piano?
Pícara: No. Bueno, mi madre solía tocar e intentó enseñarme, pero… no pudo. Yo…ya me había escapado de casa.
Bestia: Ven, siéntate (se aparta un poco del banco, dejando sitio)
Pícara: ¿Cómo?
Bestia: Siéntate aquí, conmigo. Voy a darte clases de piano.
Pícara duda y niega un poco.
Pícara: No… no. Mejor no.
Bestia: Tranquila, no muerdo. Bueno, a veces. (sonríe)
Pícara: No, no es eso. No… puedo tocar a la gente, Señor McCoy.
Bestia levanta la cabeza, y asiente.
Bestia: Tú debes de ser Pícara, ¿no?
Pícara: Si.
Bestia: Bueno, Pícara, no importa- te puedo enseñar de todas maneras. Venga.
Pícara se acerca lentamente. Se sienta al lado de Bestia.
Bestia: Veamos si con mis clases de piano puedo ayudarte a dormir. (sonríe)
Pícara sonríe cortésmente.
Bestia: Bien. Empecemos por lo básico, ¿hm?. La clave de sol. Do (toca una tecla) Ahora tú (Señala una tecla más para su izquierda) Sitúa tu mano derecha en estas cinco teclas. (Pícara obedece) Bien, toca.
Se oye una tecla.
Bestia: Re. (toca una tecla)
Pícara lo imita.
Bestia: Mi.
Pícara le sigue.
Bestia: Fa.
Pícara repite el sonido.
Bestia: Sol.
Toca la última tecla.
Bestia: Eso es. Y ahora… (toca las cinco notas de seguido)
Pícara intenta imitarlo, pero falla.
Bestia: No pasa nada. Veamos…
La coge de la muñeca, protegida por la manga de la bata.
Bestia: ¡Vaya! Sin duda estás muy tensa. Tal vez deberías…
La mira, observando su expresión en la cara.
Bestia: ¿Puedo saber qué ocurre, Pícara? ¿Es… es por el profesor? (le acerca la mano al pelo)
Pícara: Por favor, no me toque. Por favor.
Bestia aleja la mano.
Pícara: No es sólo por el profesor. Es… es por esto. (Se mira las manos).
Bestia: Son preciosas.
Pícara: Pero matan. (Una lágrima corre por su mejilla) Yo… yo no se qué hacer.
Bestia: ¿Estás pensando en recurrir a “la cura”?
Pícara: Si. Acabará con todo esto.
Bestia: ¿Segura?
Pícara suspira, y piensa.
Pícara: No.
Bestia: Créeme, no lo hará.
Pícara: ¿Está seguro? Es decir, nunca… ¿usted no ha pensado en hacer lo mismo?
Pausa. Bestia mira el piano y toca unas teclas.
Pícara: Perdone…
Bestia: No importa. Y tienes razón, lo he pensado. Consideré una atrocidad que el gobierno lo utilizara como arma… y me prohibí acercarme a los laboratorios Worthington. Pero… aún así.
Pícara toca unas teclas.
Bestia: Pícara, yo ignoro si lo has intentado con todas tus fuerzas, pero al igual que todos los alumnos de ésta mansión, tienes que aprender a controlar tus poderes. Te recuerdo que, es para eso que has venido aquí, ¿no?
(La cámara enfoca el florero de rosas encima del piano) Puede que seas mortal si te tocan… (acercamiento de su mano apunto de tocar las espinas) pero si te tocan con cuidado… (agarra la rosa, las yemas de sus dedos evitando las espinas) podrás desprender tu belleza. (la huele).
Pícara sonríe un poco.
Bestia: Estoy seguro de que eres una chica fuerte, Pícara. (pone una mano en su hombro) Sería una contrariedad que fueras por el camino fácil.
Pícara se queda pensando.
Bestia: Bueno ¿continuamos?
Pícara: No… creo que… he conciliado el sueño.
Bestia: ¿En serio? Esto tiene que ser un récord.
Pícara se ríe.
Pícara (sonríe): Gracias, señor McCoy.
Bestia (le sonríe): Buenas noches.
Pícara: Buenas noches.
Pícara deja la habitación. Bestia, pensativo, observa la rosa, moviéndola entre su índice y el pulgar.
Bestia: ¡Ay!
Suelta la rosa, y se mira la mano. El dedo índice le está sangrando. De repente, vemos que la herida empieza a curarse sola. Después deja abierta la mano por un momento y la cierra.
(Continuaría con la escena de Bobby/Kitty)
Por cierto... tenéis que escuchar claro de luna... una maravilla. En mi opinión es perfecta para expresar el sufrimiento de Bestia...
