Menudo debate, no puede uno estar ausente una mañana

Yo en general prefiero tapa dura para tomos gruesos y tapa blanda para tomos finos. Me parece el criterio más razonable, al menos para mí. Un tomo de 600 páginas lo vas a coger, abrir y manipular muchas más veces, y por su mayor peso y poca manejabilidad, la tapa dura lo protege mejor. Con tapa blanda, es muy posible que al abrirlo le salga la típica arruga en el lomo, que al apoyarlo le puedas dejar marca en los cantos, o que a la primera que se te escurra el tomo, como lo cojas por la tapa se te acabe doblando y estropeando.
Sin embargo, un tomo fino (de 200 páginas o menos) resulta un poco ridículo en tapa dura, porque casi ocupan más las cubiertas que las páginas. Y es perfectamente manejable en tapa blanda sin que ésta tenga por qué deteriorarse con el uso.
Pero vaya, que luego hay que ver cada caso particular, porque hay otros criterios que también pueden intervenir (el título elegido, el uso que se le vaya a dar, etc).
Dicho esto, al final son las editoriales las que mandan, y como casi todo se publica en tapa dura con independencia de su tamaño, al final en mi comiteca prima la tapa dura.