En todo caso, en los cómics debería haber de todo, y los personajes actuar según su personalidad. Lobezno debería poder fumar, no le afecta. No es lo mismo ponerle a fumar a él que a Ms.Marvel.
En los cómics para adolescentes de cierta edad y adultos, sí. En los que se consideren para todas las edades o preadolescentes, no.
Igual que no querríamos (o no deberíamos querer) que si le compramos un cómic a nuestro hijo de 6, 7 años de los Teen Titans Go, en la página 15 haya una mamada, una violación, alguien esnifando cocaína, un destripamiento o sí, alguien fumando.
El tabaco no se ha eliminado de la ficción; simplemente es Rated R, que es lo suyo.
Y luego, de todas formas, estaría el tema de "con qué intención" sale alguien fumando, pero si es en género adulto, ya me importa menos. El que se deje manipular o no, es cosa suya.
Un ejemplo de cómo hacer las cosas PERFECTAS:
En Mad Men fuma TODO DIOS, todo el rato, siempre hay un cigarrillo en escena. Pero también hay alguien echando el pulmón, tosiendo sangre, muriéndose de cáncer de pulmón, sin poder respirar, etc, etc. Pero no dan la chapa con el tema, simplemente lo muestran (quien sea o conozca bien a un fumador a conciencia, de los de 2 cajetillas diarias, sabe que toda esa parte que no se ve en el cine pasa, cuando echan los pulmones en ataques de tos), siempre de forma más bien sutil. Y sobre todo, hacen un ensayo capital de los vendedores de muerte de aquella época, y cómo Philip Morris era uno de los clientes más recurrentes del mundo de la publicidad.
No creo que nadie empiece a fumar por culpa de Lobezno, Lucky Luke o Gandalf (o cualquier Hobbit).
Históricamente se sabe que sí, y que ha enganchado a más gente al tabaco los galanes y divas de Hollywood, los anuncios y los héroes duros y las chicas malas, que casi cualquier otra industria.
De nuevo, las compañías y tabacaleras no son tan idiotas como para haber gastado millones de dólares en contratos con estudios, actores, personajes, creadores y obras, haciendo que además fumaran marcas específicas, si no tuviera ningún efecto.
Por poner un ejemplo a voleo; he visto centenares de adolescentes y adultos echándose fotos fumando al estilo de la estrella de cine de turno, con el filtro cuqui, la llama, y el estilo melancólico, sexy o guay de la muerte. Y esa imagen no la han creado ellos.