He leído
Button Man: Asesino de asesinosSe trata de la tercera entrega de un saga, cuya segunda parte comenté
aquí.
Después del éxito de las dos primeras sagas, el dúo creativo formado por el guionista John Wagner y el dibujante Arthur Ranson tardarían varios años en retomar la obra. Tanto es así, que tendría que llegar el nuevo siglo para que la célebre revista británica 2000 AD albergara esta continuación en la que Harry Exton volvía a enfrentarse a las siniestras Voces del Juego, que estaban empeñados en demostrar que nadie sale vivo de esta competición a vida o muerte. Wagner sigue las pautas de su trabajo anterior, a caballo entre el thriller de acción y el relato de suspense, con un marcado tono cinematográfico, al que influye tanto el ritmo narrativo como los lápices de Ranson.
La trama se centra una vez más en presentar al protagonista que pasa de cazador a presa, entrando en juego una serie de elementos tecnológicos modernos que aportan un nuevo cariz a la saga. No obstante, la base sigue siendo la misma, acosando a una Harry Exton que tiende a dar la vuelta a la tortilla en una historia electrizante y repleta de acción, aderezada con el suspense propio de los escritores británicos. Tal y como sucediera en las anteriores entregas, este pequeño recopilatorio ofrece una lectura amena y divertida, en el que se traslada al cómic una historia propia del celuloide, poniendo de manifiesto cuanta calidad atesora la revista británica 2000 AD, con pequeñas joyas como este Button Man. Por otra parte, también hay que reconocer que Wagner utiliza la misma fórmula que en anteriores entregas de la saga. Es decir, a pesar de la calidad de Button Man, y del más que apreciable producto de entretenimiento, comparable con alguno de los films similares de calidad que nos podemos encontrar a lo largo de la historia del cine, no hay un ápice de originalidad. Es una buena historia, está francamente bien escrita y dibujada, con matices, pero la sensación de haber visto esto en más de una ocasión está muy presente. El patrón apenas ha variado del concepto original, aunque Wagner realice todo tipo de giros argumentales para mantenerlo vivo. Aunque el suspense es una parte esencial de la obra, en la línea de los grandes maestros del género como Alfred Hitchcock, no deja de ser en algunos momentos bastante predecible. Precisamente, uno de los factores de suspense radica en cómo mantienen a Exton vigilado, algo que si bien se intuye y es de prever, cuando se revela como lo sencillo es en ocasiones lo más eficaz.
Reconozco que a mí me está gustando mucho esta serie, y estoy disfrutando bastante del trabajo de Wagner y Ranson, aunque como digo, la propuesta no sea ni muy original, ni un portento en muchos aspectos, pero sí que ofrece una historia sólida, bien construida y una lectura tremendamente adictiva y entretenida. Quizá tras la primera saga, en mi opinión la mejor de todas, las secuelas no dejan de ser extensiones de la historia, puede que innecesarias incluso, pero no por ello son menos disfrutables. El apartado gráfico sigue la línea de lo que ya hemos visto, aunque debo reconocer que me ha parecido ver a Ranson un poco más irregular, mostrando algunas rarezas en ciertas escenas, sobre todo cuando entran en escenas las manos de los personajes en primer plano. Es curioso, porque en los dos tomos anteriores no vi nada de esto, y me parecía que hacía un trabajo bastante bueno e impecable, con ese marcado tono realista, pero aquí no lo he visto tan suelto. No obstante, narrativamente es una delicia, sobre todo por su capacidad de trasladar a las viñetas recursos propios del celuloide. La historia es en sí misma muy cinematográfica, pero es el trabajo de Ranson el que consigue aumentar esa sensación de estar leyendo un thriller que bien podría ser una película perfectamente. Uno de los aspectos más destacables es el empleo de las luces y las sombras, transmitiendo una atmósfera desasosegante facilitando así el suspense de la trama, además de potenciar el guion de Wagner.
Finalmente, destacar que en esta ocasión, ECC incluye en una de sus publicaciones un artículo, aunque se opta por situarlo tras la lectura del tebeo, más como epílogo que como prólogo. Y creo que es bastante acertado en esta ocasión. Asimismo, mantiene su formato en tapa blanda, aunque diría que en comparación con los dos anteriores este es un poco más caro, los cuales me parecieron más económicos y con un precio ajustado. No se si es un signo de que no vendieron bien, de que ha tenido una tirada menor, o de que simplemente la vida sube en ciertos aspectos, mientras en otros parece haberse quedado estancada. Sea como sea, tercera entrega de una saga en la que Harry Exton tiene que reanudar su huida del juego de la muerte, demostrando una vez más que es un asesino de asesinos, puede que incluso el mejor. ¡Hagan sus apuestas!