O me lo parece a mi pero en lineas generales en este foro parece que esta estapa de los Vengadores esta siendo un rollazo...
Bueno, reconozco mi parte de culpa por mi comentario de hace un par de días.
Pero, bromas aparte, en realidad no sé si es un coñazo o no: está claro que hay una macrohistoria que Hickman quiere contar, y se toma su tiempo. Conceptos a gran escala cocinados a fuego lento. Conceptualmente, no es mala idea para abordar una etapa en Vengadores, pero lo malo es que al final el resultado de tu etapa depende absolutamente de lo bien que funcione esa idea y de la libertad con la que le dejen trabajar.
El problema que le he encontrado a estos Vengadores de Hickman es, curiosamente, los propios Vengadores.
Me explico: las grandes etapas de colecciones grupales (X-Men de Claremont, Nuevos Titanes de Wolfman y Pérez, JSA de Johns, los propios Vengadores de Stern) se caracterizaban fundamentalmente por la interacción de sus componentes. Está muy bien eso de darse de hostias con no-sé-quién, o viajar al espacio a hacer no-sé-qué, o recuperar personajes que llevaban desaparecidos no-sé-cuánto, pero a veces hace falta un partido de beisbol, una tarde en la piscina, un día de compras, una discusión alrededor de una mesa,...
La acción está bien, pero esto va de personajes; si los personajes no tienen una voz propia, si no tienen una puñetera línea de diálogo, se falla estrepitosamente. Hickman ha contado con una oportunidad magnífica para juntar a un montón de personajes, muchísimos, y ponerlos sobre el tablero. Pero me da la impresión, tras nueve números USA, de que esos son cromos más que personajes; si tu juntas en un mismo equipo a Lobezno con Hulk, a Lobezno con Bala de Cañón y Mancha Solar, al Capi con el Halcón, etc, digo yo que algo se tendrán que decir. Algo. Lo que sea, aunque sea una parida impropia del personaje (
guiño, guiño, codazo). Pero en este caso, o toda esa interacción ocurre "fuera de plano" o los personajes pasan los unos de los otros a
puñaos.
Al final la conclusión que me queda es que Hickman quiere contar una historia, probablemente cojonuda, y le da igual con quién la cuente, hasta el punto de que ha creado tres personajes "nuevos" que tienen toda la pinta de que van a cargar con el peso de la etapa.
Mal asunto.
Y más si comparamos con los Imposibles Vengadores de Remender, que son todo lo contrario. Veo a Thor acercandose a consolar a Lobezno al final del número cuatro, las dudas antes de la rueda de prensa, la mala hostia de La Avispa con el incidente del cuadro o las tensiones entre algunos de los personajes y me digo "eso es".
Vamos, que ya veremos hacia donde van estos Vengadores de Hickman. Pero de momento, está muy lejos de lo que me habría gustado encontrarme cuando se anunció la etapa. Y la otra colección, la que me vuelve loco, a priori no la iba ni a seguir. Cosas.