PARAÍSO-X
Muchos os habréis dado cuenta de que ya rara vez me dejo caer por los hilos para soltar uno de esos análisis tipo ladrillo sobre lo que me ha parecido un tebeo. No es que haya dejado de gustarme hacerlo -de hecho me encanta- sino simplemente que cada vez tengo menos tiempo para escribir de manera extensa en el foro, por lo que suelo limitarme a enlazar los artículos que voy escribiendo para otras plataformas o revistas.
Digo esto, porque el mero hecho de que me sienta impelido a hablar de un cómic, para bien o para mal, por negativa que sea mi crítica, ya significa que esa obra es para mí lo suficientemente importante como para ser tenida en cuenta, me haya gustado más o menos.
Es el caso de
Paraíso-X.
Paraíso-X no es perfecta, como ya no lo fue Universo-X. Comparte varios de los defectos y virtudes de esta, si bien, lo primero en lo que hay que reparar al hablar de ella es en esto:
Paraíso-X es mucho, mucho, mucho. De lo que sea, pero mucho.
No quiero repetirme en exceso, ya que como digo, mucho de lo que dije sobre Universo-X sigue siendo válido ahora, pero sí quisiera destacar tres aspectos fundamentales de esta megaobra:
1- Paraíso-X está muy bien escrita. Tiene grandes momentos, pasajes absolutamente épicos, reflexivos o bien dialogados entre personajes muy interesantes que hacen avanzar sus pequeñas subtramas atrayendo al lector por lo que sucederá. La prosa de Krueger es buena, y sus diálogos también lo son. El dibujo y narrativa de Braithwaite también ayuda a que el nivel sea notable. Esto permite que disfrutemos de magníficos momentos en compañía del Logan de Días del futuro pasado, de Frank Castle, de Daredevil, del Capitan Britania o de X-51. Son estas pequeñas historias, estos capítulos que acaban en si mismos una parte de cada una de las misiones que los distintos personajes se auto imponen, las que hacen merecer la historia.
2- Paraíso-X es un coñazo en sus formas y estructuras. Esto puede parecer una contradicción, pero no lo es en absoluto. Lo poco gusta y lo mucho cansa. Uno de los mejores tramos del tomo es el primero, el que corresponde a la serie
Heralds. Aquí el lector se maravilla y disfruta ante el grupo reunido por el antiguo hombre máquina, la narrativa es atractiva, y las historias tienen un sentido concreto. Es más adelante, con el repetitivo esquema de flashback explicativo (que te hace rogar porque nunca más tengas que leer uno, tomando la peor síntesis recopilatoria de los tebeos para chiquillos del "¿Qué ha pasado en números anteriores y quien es este tío?") que llega a cansar hasta lo indecible a un lector harto de ver como el esquema que en un principio era curioso y entretenido, 50 (¡50!) tebeos después se ha convertido en un suplicio. Agotan los esquemas repetitivos a principio y final en ambos diálogos que cierra siempre X-51 y en la presentación que el robot hace de los personajes principales. Este es un recurso del cómic que debe ser usado con mucha sutileza y dosificación, y que aquí por desgracia está totalmente sobredimensionado, lo que muchas veces hace que pienses que Paraíso-X es un
blablablablablablabla de datos frikis que ya casi todos conocemos y de conversaciones pseudo filosóficas que no llegan a ningún lado y acaban haciéndose MUY, MUY pesadas. Uno de los peores defectos de la historia.
3- La trama global de Paraíso-X acaba por no gustar a nadie. Es demasiado metafísica, demasiado ridícula en sus pretensiones existenciales, demasiado larga. Se nota que Ross y Krueger quisieron estirar el chicle más allá de lo que era aconsejable, algo que ya se notó en el segundo tomo, Universo-X. Y la trama sufre estos excesos. Un batiburrillo existencial de muertos que no mueren, paraísos falsos, problemas epistemológicos, falsas ideas, personajes que creen ser lo que no son ya que son una idea surgida de un concepto colectivo, y la entropía dominando hasta donde llega la tinta. El cocido farragoso de una historia interminable a la que no se le ve final, importancia, ni objetivo. El riesgo de alejar mucho el microscopio de los personajes y no ofrecer historias manejables, es que todo acaba importando un pimiento ¿Muerte, cielo, infierno, vida, la tierra, el universo? Tras cerca de 1500 páginas nos da del todo igual. Lo que en Tierra-X era vibrante, desde Universo-X no importa un comino a nadie. Los personajes se limitan a pasearse, las semilolas celestiales pierden sentido, y las pequeñas historias acaban enterradas por la gran bola de barro de la trama existencial, que aburre y agota a partes iguales, y que al final de cada tomo deja completamente agotado al lector de tanta historia entrópica del origen del universo. Se dice que al escribir, al contar algo, solo hay una norma: No aburras a tu lector.
Por último, pero ya fuera de lo señalado, añadiría que en lo personal he disfrutado más este Paraíso-X que Universo-X por un motivo básico; la elección de personajes. Estaba cansado de dar tantas vueltas a Reed, Capitán América y X-51, después de tantas y tantas páginas en que pierden su frescura inicial (el magnífico Capi de Tierra-X), y la inclusión y protagonismo de Lobezno, Punisher o Daredevil, se agradece mucho. Punto y aparte está el tema de que autores que acometen un proyecto como este, tengan manía confesa a personajes como Hulk, Lobezno o Iron Man. Esto me parece muy lógico y respetable, pero si planeas contar la gran historia del UM sobre TODOS sus personajes, a esas fobias no se les puede ver el plumero. Si yo hiciera una historia así, por poco que me gusten, debería encargarme de retratar la síntesis y el alma de mis personajes menos favoritos, sobre todo si son tan importantes como los mentados, y darles un espacio digno. Porque a mi no me guste Spideman (imaginemos) no puedo dejarlo fuera de la historia "definitiva" Marvel. Creo que es poco apropiado.
En fin, ya me he extendido más de lo que quería, así que concluyo:
Paraíso-X es entretenida hasta el momento en que se hace un coñazo (otra vez). Ni más ni menos. Tiene historias muy chulas, y son precisamente esas pequeñas historias las que hacen que la obra merezca la pena. Si eres capaz de disfrutarlas, y consigues que te dé más igual la trama principal, y eres capaz de obviar los repetitivos esquemas narrativos de Krueger (el homenaje está bien, que todos los números empiecen igual, vale, pero 50 números igual es pasarse bastante), es posible que disfrutes bastante con este tomo.
Si te ha gustado Universo-X te gustará este. Y en mi opinión mejora al anterior.
Pero ambos están a años luz de Tierra-X, en lo que a originalidad y no resultar pesados se refiere. La gallina de los huevos de oro acabó exprimida y explotada sin nada nuevo que contar.
Ah, y el final...En fin. Lo dicho; una trama que realmente no van a ninguna parte.
La entropía por la entropía.