Portada con tremenda declaración de intenciones.
Hay que partir del momento y contexto en el que sale publicada esta serie. Dos años antes, en el mercado existen dos personajes (Superman y Batman) que se han ganado el favor del público. La respuesta de Timely Cómics (hablo de memoria, creo que se llamaba así) es el Capitán America que aúna por un lado la fuerza como icono que podía ser Superman y, a su vez, coge elementos de Batman como es el ayudante juvenil. En todo caso, los tres personajes difieren notablemente unos de otros, lo que es de agradecer.
El nombre del personaje, el escudo y el uniforme no deja de ser un mensaje claro de lo que uno se iba a encontrar cuando empezase a leer sus historias. Paladín de una nación y defensor de esta en unos tiempos convulsos. Me llama la atención, que la salida de su nº 1 se produce en marzo de 1941, cuando de todos es sabido que EEUU no entra en el conflicto hasta que se produce el ataque a Pearl Harbour el 6 de diciembre de 1941. Es decir, que una portada de estas características nos invita a deducir muchas cosas.
- Que en EEUU había un temor a ser atacados por Alemania o por las potencias del eje. Basta fijarse en el mapa que aparece en el lado izquierdo inferior.
- Que se temía que dicho ataque comenzase a través de sabotajes previos a una declaración de guerra formal. Imagen de la televisión.
- Que incluso dichos ataques ya habían comenzado, ver el operador que está hablando con el saboteador.
- Que la personalización del enemigo se hace en la persona de Hitler, según se ve por motivos obvios.
Luego hay detalles curiosos, que no me atrevo a decir si son intencionados o no. La pistola que se dispara en primera plana es un modelo alemán, sin embargo la ametralladora del soldado de la izquierda es un modelo ruso que no fue usado por el ejercito alemán salvo en soldados a título particular. Recordar que la invasión alemana a Polonia viene precedida por el pacto soviético-alemán por el cual se acordaba la no agresión entre ambas potencias y la división de las zonas de influencia. Ese pacto (y sigo hablando de memoria) estuvo más o menos vigente hasta que se inicia la invasión germana de suelo soviético en el verano de 1941. En atención a las fechas, me atrevo a decir que es posible que el soldado de la metralleta y el que está al lado debían ser soldados soviéticos y que posiblemente fuesen cambiados a última hora para que pareciesen soldados alemanes. Como detalle que lo puede corroborar, el resto de figuras portan el simbolo nazi, en cambio estas dos no.
La mayor virtud de la portada es lo que quiere decir y en que momento. Fuera de eso, y en términos artísticos, obviamente no es una gran ilustración, pero en todo caso hay que tener en cuenta la pila de años que tiene encima. Personalmente, le doy un 7, 5.