La imposible Patrulla-X 1Hm. Un número de esta importancia se merece un análisis especial.
Un buen número, con un guión muy entretenido a la par que divertido. Y un dibujante que despierta en muchos los mejores recuerdos... aunque no esté a la altura de su pasado. No sé bien que manía les ha entrado a todos de hacer el dibujo más "realista", Larroca incluido, pero de esta manera se pierde identidad y el estilo se diluye. El dibujo de Carlos ha perdido "aristas" y ese toque
cartoon que tan bien le quedada. Pero bueno, Pacheco es mucho Pacheco, y aunque no brille como en aquellos tiempos de X-Men junto a Joe Kelly, sigue siendo un gran dibujante.
Lo importante es que con este número hace su entrada -anunciada en el último número de Uncanny- oficialmente el supervillano favorito de todos. Mutantes y mutantas, con todos vosotros:
Mister Siniestro.
¿Y con qué creéis que voy a ser increíblemente crítico en un cómic donde Nathan es la estrella principal?
Pues eso. Pero más tarde.
Me gusta el planteamiento de la serie. Me gusta que Cíclope vuelva a aquello de que el mundo los considere superhéroes. Con ello Kieron Gillen retoma el concepto que presentara Whedon en sus Astonishing X-Men.
Me gusta que Cíclope hable con desdén de los Vengadores
Ese es el espíritu joder. Si hay un problema y la Patrulla-X no es capaz de resolverlo, es que no puede resolverse. Los anti-héroes más poderosos del mundo están aquí. Si el mundo teme a los mutantes es que tiene motivos para temerlos.
Me parece coherente con el nuevo Scott -esto va a ser como lo de que se seguía diciendo "La nueva Patrulla-X" aún 10 años después- esa declaración de fuerza, de poder. Entiendo como natural la posición que ha tomado. Y me gusta el equipo, especialmente lo que pueda aportar Coloso.
Un estado que puede dar mucho juego y que resulta divertidísimo.
Pero hablemos de lo que realmente importa:
SINIESTRO.
¿Es este el verdadero Nathaniel Essex? No.
¿Es un buen personaje? Sí, pero...
Vale. Cambio de rol. Aquí apenas hay científico amoral, no hay vampiro de mármol frío y solemne. No hay una exposición lógica, no hay contundencia. Ni siquiera ese amaneramiento intelectual que siempre me ha encantado ver en el bueno de Essex. No hay secretos, no hay juegos de poder. No es el Siniestro de Niceza, ni el de Claremont, ni el de Milligan, ni el de Lobdell. Es un nuevo personaje.
Este Siniestro es más caótico. Incoherente. Desequilibrado. No tiene el frío razonamiento de antes con el cual te explicaba perfectamente claro porque era necesario que murieras. Y el personaje se lo creía. Este Siniestro se asemeja más a otro tipo de villano. De los que son
"críptico-surrealista".
"Hablo y no sabes de que hablo. Pero quedo guay".
Como supondréis no me convence.
Me gusta que vuelva el aire victoriano y que se lo represente como un carácter elegante. Eso está bien. La verdad es que puede dar mucho de sí. Pero ya se sabe, que cuanto más conoces e idealizas a un personaje, menos te gusta que lo meneen, y mejor que tú nadie lo va a entender.
En fin... Fallos obvios:
-Siniestro no habla de Dios. Quizás Essex si lo hizo. Pero nunca el científico loco. El hombre de ciencia no habla en términos de alma, paraísos o dioses. Ni sacristía, ni cielos. Está fuera de lugar. Es algo que va profundamente contra la forma de ser del personaje.
-Y lo más importante: Siniestro no es una parodia. No me gusta ese aire burlón y excéntrico. No está loco. No de esa manera al menos. La baza de Siniestro es la fría lógica, la razón por encima de la humanidad. Pero no es histriónico. Ni un payaso. Ni bromea de esa manera -ni prácticamente de ninguna otra-. Demasiado "alegre" veo a este Siniestro. Demasiado "Jokerizado". Mucho hablar de cosas que no tienen que ver con lo que pasa -espárragos y demás- como hacen otros villanos para demostrar lo despegados que están de la realidad y lo poco que les importa el mundo con el que interaccionan. No debería ser así.
En fin... Un buen número 1. Divertido, entretenido, emocionante. Un tanto contenido quizás. Pero interesante.
Lo único que puedo esperar, es que por favor, me cuiden más a mi querido
Essex en el futuro. Con personajes como él no se juega. Patrimonio mutante.