Anoche me leí
Terry y los Piratas: Número especial. Se trata de la primera etapa de las tiras de prensa dominicales de la serie, que en sus primeros tiempos era independiente de la tira diaria.
En esta historia conocemos al joven Terry Lee y a su amigo Pat Ryan, que están en el sur de China y se dirigen a Shaghai en barco. Durante el trayecto, los piratas de la Dama Dragón, que los mantendrá prisioneros. Sin embargo, su cautiverio no durará mucho, pues un nuevo pirata, Fang, los hará prisioneros, hasta que consiguen enviar un SOS que llega a un buque americano, que los rescata. Pese a haberlos tenido prisioneros, deciden no delatar a la Dama Dragón.
Pat y Terry llegan a Shanghai y entonces se une al reparto su sirviente chino Connie (diminutivo de Confucio). En este momento inician un viaje en avión a Pekín, aunque no llegaran a su destino.
Por el camino, son secuestrados por una banda de bandidos que se han hecho con una mina/plataforma petrolífera. Consiguen escapar y provocar un incendio para atraer a las autoridades chinas, aunque la única que acude en su ayuda es la Dama Dragón, que los captura y se los lleva a su base, un antiguo monasterio en una isla.
Hasta aquí la historia era una historia río, en la que unos acontecimientos sucedían a otros. Sin embargo, a partir del cautiverio en el monasterio, nos encontramos con pequeños interludios cómicos (muy al estilo de la escuela Bruguera), en los que vemos el posible romance entre Pat y la Dama Dragón, además de explorar el potencial cómico de Connie.
Hartos de un cautiverio sin mucho sentido, hacen señas a un buque americano que pasaba por allí, que los rescata, llevándose el tesoro de la Dama Dragón, que huye. Sin embargo, cuando el gobierno chino decide trasladar el tesoro, al Dama Dragón logra robarlo... sólo para que un nuevo personaje se lo robe y los capture.
Se trata del Capitán Blaze, un traficante de armas inglés que somete a la Dama a todo tipo de humillaciones sólo para ver de qué pasta están hechos los demás prisioneros. La Dama no tardará en escapar y volver con un ejército para tomar la fortaleza.
Mientras trasladan a los prisioneros y al tesoro, Connie y Blaze escapan, lo que deja a Pat y Terry a merced de la antigua pirata, reconvertida ahora en bandida, que los obliga a formar parte de su milicia. Connie intentará sin mucho éxito rescatarlos. Al final, será el propio gobierno chino el que los libere, sólo para juzgarlos por criminales. La oportuna intervención de un irreconocible Blaze les salvará la vida.
Con esto termina el tomo, pues las tiras dominicales pasaron a estar integradas en la trama de las tiras diarias. La verdad lo he disfrutado bastante, aunque en ocasiones se hace bastante repetitivo, ya que Terry y Pat son prisioneros de la Dama Dragón nada menos que ¡¡cuatro veces!! a lo largo de la historia.