Sin duda, de lo mejorcito de John Landis, junto a la divertidísima "The blues brothers". Para mí gusto, una mezcla perfecta de terror y humor. La película no tiene grandes pretensiones, lo que le permite a Landis lograr un resultado más que notable. Si a eso le sumamos una transformación licántropa legendaria, obtenemos un filme que, a día de hoy, y por méritos propios, puede ser considerado todo un clásico dentro del género. Mi nota: 8