La etapa actual de Astonishing X-Men es, para mi gusto, la mejor de toda la serie (Whedon, te miro a tí).
De largo el mejor número de boda que he visto en un cómic Marvel. Me he sorprendido disfrutando al máximo un cómic que es más romántico que superheróico. Lejos de hacer una estupidez mediática con el tema, esta boda está tratada con una naturalidad tal que debería enseñarse en los colegios para dar clases de tolerancia.
Todos los personajes están tratados de una manera profunda, creíble y coherente. Los conflictos emocionales son el leit-motiv de toda la serie y se saca un partido increíble a personajes con los que otros guionistas menos capaces no tienen ni puta idea de qué hacer con ellos.
Me sorprendo descubriendo en este cómic a Marjorie Liu, grandísima guionista a la que voy a seguir cual perro faldero desde ahora. Ya los números anteriores me estaban gustando mucho, y éste lo remata.
La mejor serie mutante actual para mi gusto, ahí ahí con X-Factor.
Para que luego digan que a los veteranos sólo nos gustan los cómics de hace 20 ó 30 años: no señores, lo que nos gustan son los buenos tebeos. Punto.
Y este lo es. Y mucho.