Yo sigo pensando que lo que es único de Spiderman es lo que siente (o mejor sentía) el lector al entrar en su mundo, que es una mezcla de identificación y admiración.
Identificación porque, al fin y al cabo, es un tío normal, con problemas con su jefe, problemas de dinero, problemas de familia, con los amigos y que, pese a todo, disfruta de las cosas sencillas de la vida y admás lo hace con humor. No necesita un deportido, ni un yate, ni un premio por lo que hace. Cuantas veces le hemos visto sentado delante de la tele con un refresco recuperándose de las heridas de una batalla anterior.
Admiración porque, es un héroe, tiene podreres, es inteligente, gracioso, tiene una increible fuerza de voluntad y es una de las personas más integras que hay en el Universo Marvel.
Y yo creo que todo eso se quiebra un poco con BND, porque lo "normal" en la experiencia vital de una persona, y más de una persona que huérfana, es que quiera casarse y formar una familia, y darle a su hijo/a lo que el nunca tuvo, y transmitir todo lo que Tío Ben le dijo. Yo no me identifico un tipo que tenía todo eso, que estaba casado con una supermodelo y renunció a todo ello. Ni tampoco puedo admirarlo.
Admito que el estado de soltero superhéroico es perfecto para tipos como Tony Stark o Bruce Wayne, incluso para personas condenadas a perderlo todo como Daredevil o Lobezno. Los matrimonios de estos no funcionan. ¿Pero Peter Parker soltero de oro? No lo veo, la verdad. Puede que el matrimonio fuese algo impuesto por la editorial, por Stan Lee o por el Papa, pero en lugar de quejarse de esto podrían haberlo explotado mucho más, y la mayoría de autores no han sabdio hacerlo, era algo a lo que le tenían miedo, con la excepción de JMS.