Mucho he tardado en leer "El primero de la clase", pero su lectura ha colmado e incluso superado mis ya de por si altas expectativas. Esperaba que después de las impactantes revelaciones del tomo anterior parte del encanto de la serie se fuera al garete, pero afortunadamente no ha sido así, sino al contrario, el encanto sigue presente y a su vez la serie va evolucionando hacia terrenos más trascendentales que los anteriormente transitados, lo que no hace más que aumentar el interés que ya despertaba la historia.
En cuanto a las revelaciones dadas en el tomo anterior, son dejadas un tanto de lado, mostrándose las consecuencias de las mismas en los personajes principales, pero dejando la puerta abierta a una futura historia que seguro Kirkman desarrollará. Al mismo tiempo se plantean nuevas e interesantes subtramas lo que supone un gran punto a favor del guionista, ya que, sin dejar de lado la historia principal (de la que es imposible olvidarse debido a las continuas referencias por parte de los personajes), Kirkman es capaz de desarrollar nuevos argumentos sin dar la sensación de estar metidos con calzador, todo ello unido a una caracterización SOBERBIA de todos y cada uno de los personajes, consiguiendo que según pasan los números, te identifiques más y más con los mismos.
Además, por si fuera poco, el apartado gráfico no hace más que mejorar desde que Ryan Ottley se encarga de la serie, mejorando, en mi opinión, el trabajo de Cory Walker, al que se le notaba muy presionado por las fechas de entrega.
Lo mejor: Todo
Lo peor: Que el cabrón de Kirkman me tiene en ascuas con tanta subtrama abierta...