Nocenti trató temas poco habituales en los comics de superhéroes (militarismo, ecologismo, amenaza nuclear...) y tenía un estilo muy marcado con el que a veces, sí, parecía que los personajes más que hablar, daban un discurso; pero eso no quita que desarrollara muy bien a los personajes y sus relaciones (especialmente Matt y Karen, y Tifoidea y Kingpin) y que abriera nuevos caminos para un personaje que parecía haber encontrado su final feliz y cerrado tras Miller. Y todo dibujado por un Romita Jr. en estado de gracia.
No digo que la etapa sea perfecta, pero desde luego, está muy lejos de ser aburrida y horrible. Para nada.