¿Recordáis la que se lió cuando cerró la editorial Glenat? Hicieron packs (saldos) de sus series manga. Eran packs de unos cinco tomos más o menos al precio de ¿dos? ¿tres? Y distribuyeron varias series así, completas y en orden, durante unos pocos meses.
Se lió porque muchas librerías se negaron a venderlos. El argumento, con razón, es que el dinero que uno destinaba a las novedades del mes, se desplazaba a esos packs, y el dinero que Glenat ganaba no repercutía en sacar nuevo material. Por lo tanto, el consumidor no usaba ese dinero para comprar a las editoriales en funcionamiento lo que suponía pérdidas y que no hubiera movimiento en el mercado... Yo así me hice la serie Claymore. Un tiempo después, la propia editorial saldaba en sus oficinas lo que les quedaba para la gente que se molestase en ir allí.
No creo que esto llegue a pasar con ECC, pero imaginad que algo así pasara. Anda que no habría tortas...