Yo a este tipo de hombres "presuntamente" no los entiendo.
Tienes a Harvey Weinstein, Jeffrey Epstein y otros depredadores que saben que lo mejor es callarse la boca, que ya demasiado tienen con todo lo que hacen (hacían) y poco les cayó incluso para lo que hicieron. Gente por la que empezó el movimiento del Mee Too, y que intentaron pasar bajo el radar para que no se supiera lo que hacían durante años.
Pero luego tienes a tíos como Gaiman, de esos que van de yo soy muy feminista, yo soy muy inclusivo, yo soy muy moderno, mira mi obra, mira mi tal, si no estás de acuerdo eres patatín, patatán, desde un altar moral... y que luego, insisto, de confirmarse, salgan estas cosas, es para darle una hostia con la mano abierta pero por todas partes.
Hay que ser cínico, hipócrita y rastrero para ir por la vida de aliadé y hacer estas cosas por detrás. A mí es que me estalla la cabeza.
Es como si Hannibal Lecter encabezara el movimiento vegano.
En fin, ya veremos en qué queda. Pero como él y otros dirían de su rollo dirían, desde ese altar pose que no se cree nadie, hay que apoyar a las víctimas siempre lo primero, así que ahora te jodes y bailas, amigo Neil.