De todos modos, en esto de la autocensura voy a hacer de abogado del Diablo y reconocer que las cosas no fueron tan mal con ella: es decir, muchos de los cómics que nos gustan se han ido conformando por esas reglas que se autoimpusieron las editoriales.
Me explico, el cómic de superhéroes "clásico" tenía unas reglas internas que son las que me gustaron a mí de chaval: violencia fantástica, irreal e inocentona; sin escenas de sexo explícito; sin palabras malsonantes; los héroes son falibles, pero no cometen intencionadamente actos malvados; y un largo etc... No digo que solamente tenga que existir este tipo de cómic, solo digo que estas limitaciones que impuso el Comics Code terminaron de configurar el tebeo de superhéroes de la Edad de Plata tal y como lo conocemos. ¿Qué hubiera pasado si no hubiera existido el Code? Pues seguramente los cómics se hubieran parecido más a los de la Edad de Oro: con los héroes matando a balazos a sus enemigos, con ciertos elementos macabros copiados de los cómics de EC, con una mentalidad fascistoide del protagonista sobre que el fin justifica los medios... Yo creo que el cómic de superhéroes hubiera evolucionado de forma diferente, y no estoy seguro de que hubiera sido a mejor.
Pues efectivamente, esa censura, junto a otros factores, fue la que configuró los cómics, en este caso de superhéroes, tal y como los conocimos.
Y, si los empezamos a seguir de pequeños, es porque nos gustaba lo que nos ofrecía. Ya sabías lo que te ibas a encontrar aquí, y nos encantaba.
Conocías las reglas de ese universo.
A este respecto, recuerdo que el primer cómic de "superhéroes" que leí, fuera de Marvel o DC, y sin contar cosas como El Hombre Enmascarado, fue el número 1 de Juez Dredd de Zinco, el que contenía la saga de "Juez Muerte vive".
Aparte de ser uno de mis cómics favoritos de toda la vida, recuerdo que me quedé alucinado con él. No ya por su calidad en todos los aspectos, sino porque, esa forma de hacer cómics a la que yo estaba acostumbrado, aquí saltaba por los aires: El héroe mataba sin pestañear si era necesario,;había muerte en caso cada página, y muertes horribles, por cierto; y los villanos eran los mayores hdp que había visto en mi vida...
Me quedé en shock.
(A día de hoy conservo un par de ejemplares de ese número de Zinco. Y me sigue alucinando tanto como el primer día).