Los Cuatro Fantásticos. Tomo Omnigold 1: Origen (1961-1963) Ahí van mis impresiones del primer OG de los 4F.
No me extraña que en su momento estos cómics tuvieran el éxito que tuvieron. Lógicamente hay que trasladarse a su época, leídos hoy en día son bastante inocentes. Pero creo que precisamente a esa inocencia se debe su éxito, en un tiempo en el que la gente quedaba asombrada en el cine con películas de ciencia ficción de serie B.
Historias grandilocuentes, peleas de patio de colegio, heroicidades de cine de sobremesa… Pero entretenimiento muy efectivo que para los chavales de la época debió ser un soplo de aire fresco. Eso sumado a la imaginación de sus creadores.
No creo que los 4 Fantásticos tengan los problemas de incomprensión de un Peter Parker, por parte de sus amigos, de la prensa, de la ciudadanía en general. Aquí son más vistos como héroes en general, quitando algún momento de suplantación de algún enemigo que se queda en nada. Pero no dejan de ser una familia y eso los hace más humanos, más cercanos, hace que los lectores se sientan identificados, una de las claves del triunfo de Marvel.
Leídos ahora estos números hay algunos detalles que destacan más de lo que recordaba. Por ejemplo, la relación de Sue con Reed en buena parte del tomo cuelga de un hilo, y Namor era realmente una opción a considerar seriamente para la Chica Invisible. Y luego, la transformación de la Cosa no era tan estable como tiempo después, volviendo a ser Ben Grimm a ratos en más o menos la mitad de los números.
La evolución en el dibujo de Kirby se va notando con el paso de los números. Los primeros son más bien poco detallados y toscos pero poco a poco va refinando sus diseños. La Antorcha adquiere la imagen conocida ya en el tercer número y la Cosa de los últimos números ya poco tiene que ver con la inicial, que no era más que un monstruo más de la factoría Kirby de historias cortas. Pese a todo, todavía hay evolución por delante.
No falta la clásica rivalidad con la URSS y los malvados rojos, pero no es hasta el número 12 que aparece algún villano propio del conflicto. Al anticomunismo hay que sumar claros signos machistas muy propios de la mentalidad de la época. Lo que le dicen a Sue en la página 301, en el sentido que está allí por ser guapa y levantar la moral a los hombres, visto ahora es para quedar horrorizado. Eran otros tiempos.
En cuanto a las historias presentadas, los tres primeros números son muy simples. Creo que a partir del 4 la cosa mejora sustancialmente. Ese regreso de Namor creo que está muy bien narrado. También la presentación del Dr. Muerte y sobretodo, diría, el número 6 donde se alían ambos.
A partir de ahí van pasando villanos que se quedarían por siempre como el Amo de Marionetas, el Pensador Loco, el Superskrull…
Una de las grandes creaciones que acabaría siendo pieza clave en el Universo Marvel es el Vigilante. Aparece en el número 13, en un giro de los acontecimientos que creo que supone un paso adelante en cuanto a guiones algo más elaborados.
Otro personaje de lo más imaginativo es el Hombre Imposible. Nada que ver con los supervillanos típicos sino un extraterrestre con mentalidad de crío que lo único que no soporta es aburrirse. No me extrañaría que el personaje de La Máscara, que interpretó Jim Carrey en el cine, estuviera inspirado en él.
La joya de la corona de este tomo es el Annual 1. Genial historia épica llena de aventura y dramatismo. La parte del origen de los atlantes y la de la invasión me parecen muy grandes, muy bien narradas y con un Kirby espectacular por momentos. La imagen final de Namor solo abandonado por unos y otros es sobrecogedora.
Algunos de los últimos números me parecen también de lo más interesantes donde, además, se nota una sustancial mejora en los diálogos. Destacaría el 19, con el viaje al imperio egipcio, y el 21, con ramalazo político y ético. Curiosamente los dos villanos volverían tiempo después asumiendo otras identidades.
Lectura recomendable para un buen tomo. Y sobretodo historia viva del cómic.