En mi caso el tiempo que le dedico es residual, el que dejan trabajo/casa/chiquillos, robado al sueño.
Justo antes de dormir, cada día toca elegir entre lectura de cómics, de libro o serie (o parte de serie), según tenga el cuerpo cada día y el tiempo que le pueda dedicar, que no suele exceder de 30 min, y así, pues cunde poco la cosa y la pila de pendientes no hace sino crecer y crecer.
Una etapa de la vida, ya tocarán otras donde lo que sobre sea tiempo para leer y se echará de menos lo que se tiene a día de hoy.