La clave es que ninguna editorial de cómics cierra por gusto, y ya sabemos que no pocas han echado la persiana (o malviven como pueden).
Algunas con licencias muy potentes, y malas gestiones al margen, lo cierto es que no es un mundillo fácil. Desde fuera entiendo que parece más sota, caballo y rey, y que una editorial la lleva cualquiera, pero esto es como la política, por más que pensemos "yo lo arreglaba en dos días", ya sabemos, eso de que todos somos entrenadores y tal
Yo no lo veo nada fácil. De hecho, si fuera mi dinero el que está en juego, siendo el editor de una editorial pequeña como esta de Fandogamia, seguro que me sube la tensión.
El caso es que como todo, el tema es mucho más complejo de lo que parece, y entran muchos factores. Primero, que el mundo editorial ha cambiado muchísimo en los últimos cuarenta años, y que ahora la oferta de entretenimiento es brutal (en un mundo plagado de videojuegos, youtube, streaming, internet en general, ya los cómics no resultan tan atractivos), y comparativamente, el cómic es un mercado residual, que da muchísimo, muchísimo menos dinero que el cine, los videojuegos o incluso que los cromos. No es un producto con el que uno se haga rico, teniendo en cuenta que muchas tiradas no pasan de los 2000-3000 ejemplares en el mejor de los casos. En el sector del libro se vende más, y aun así, las editoriales hacen caja con el puñado de grandes éxitos que pasan ventas de centenares de miles, cuando la mayoría de libros de cierto caché se mueven entre los 5.000-25.000 (menos de eso, a las editoriales grandes no les sale a cuenta).
En fin, que por supuesto yo tampoco tengo la llave ni la solución para nada de esto.
Pero como digo, sí tengo claro que es un mercado muy difícil, y en el que cuesta sobrevivir, como dice el editor de Fandogamia.