He leído
Salvajes Vengadores Nº 3-4.
Creo que ya lo habéis definido bastante bien: sangre, acción, macarrada y dibujo de Deodato en horas bajas, si es que alguna vez estuvo en horas altas. De momento parece que Duggan lo que pretende es la espectacularidad por encima de otra cosa y la verdad es que como producto de entretenimiento lo consigue con creces. El tratamiento de los personajes, por llamarlo de algún modo, es muy básico y todo se centra en una enorme pelea que no parece tener fin, y que se desarrolla aquí y allá sin demasiadas explicaciones, cambiando de escenario o apareciendo y desapareciendo personajes casi por arte de magia. Lobezno sigue llevándose la palma con las escenas bizarras, primero
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y segundo con con esa desaparición fortuita cuando se lanza contra el Dios de la Médula, y su posterior aparición más tarde, igual de fortuita.
Tampoco se queda atrás Conan,
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O la aparición estelar de Veneno,
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En definitiva, una sucesión rápida de acontecimientos, que no dejan tiempo para tomar aliento si quiera, sin demasiada solidez narrativa en ocasiones, y poco más. No voy a decir que me esperara gran cosa de la serie, pero al menos unos mínimos de diálogos y argumento, en lugar de una sucesión de clichés, poses molonas y acción propia de las películas de los noventa, con la profundidad de un charco. Yo sabía un poco a lo que venía, eso desde luego, pero creo que ha sobrepasado incluso mis expectativas en lo que a macarrada se refiere. Es una verdadera lástima que a Conan se le utilice para esto. Bueno, y al resto de personajes igual, claro, pero se me entiende.
Respecto a lo que comenta
Essex de Castle, yo lo veo como una forma de cabrearlo, más que como un intento de cambiar un aspecto tan importante en lo que al personaje se refiere. No veo a Duggan con esas intenciones, ni con la profundidad suficiente para explorar lo que supone este giro de manera psicológica. Sinceramente, le estamos dando más atención de lo que realmente merezca, y seguramente el tema ni se vuelva a tratar. Lo dicho, una serie de momento muy floja, pero muy entretenida eso sí, con muchísima acción y cierto punto gore. Para fans de las macarradas.