Es que además haciendo eso estás quitando a otras personas la posibilidad de conseguir el tomo.
Ojo, no te estoy criticando, que entiendo la ansiedad que puede producir la incertidumbre de conseguirlo (que ya es triste que haya que estar así por culpa de una decisión editorial) y que cada uno se cubre las espaldas como puede, pero hoy en día es muy sencillo estar pendiente de las redes sociales de esas tiendas, y al momento de abrir las reservas, cogerlo ahí y te dejas de estar pensando en ir corriendo a Fnacs ni cosas así.
Lo que es más triste todavía es lo que comenta Angelus, que al final haciendo esto también entras en ese juego. Pero bueno, al que no tiene tienda habitual como es el caso de Ignacio, tampoco le quedan muchas más opciones, más allá de mandarles al carajo y no comprar.