Leído el último número de
Año Uno.
Al final ha resultado un arco argumental bastante flojo. No se muy bien que ha querido contarnos Williamson con esta historia. Supongo que hacer recordar a Barry fragmentos de su pasado que había olvidado, pero tampoco creo que hicieran falta 6 números para eso. Con una grapa hubiera bastado en mi opinión.
El dibujo tampoco ha ayudado al resultado final del arco. Porter está muy irregular y parece desganado en muchas partes. No es un dibujante que me enamore, eso es cierto, pero le he visto trabajos mejores.
En el siguiente número vuelve Sandoval y eso es suficiente aliciente para seguir unos meses más, hasta que se produzca el necesario cambio de guionista que pide la serie en los últimos tiempos.