Leído el tomo 2 de
The Fix, Leyes, perretes y zoquetes en el que Nick Spencer y Steve Lieber siguen al fente del cañon narandonos las peripecias de Roy y Mac.
Este volumen que contienen los números #5 a #8 de la edición americana sigue la trama donde la dejamos en el anterior volumen, con Roy enfrentandose al
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y Mac haciendo buenas migas con su nuevo compañero Pretzels.
La mayor diferencia con el anterior tomo es esa, Roy y Mac ya no estan juntos. Seguiremos por separado a cada personaje en sus peripecias (un poco como cuando Clint y Kate se separaron en el Ojo de Halcón de Fraction) esperando el momento en el que se reencuentren.
La historia de centra algo mas en Roy, que se ha metido en un lio de aupa. Mientras seguimos su
investigación iremos conociendo a personajes tan estrambóticos como el Chaval, alcalde lo Los Angeles o Matty Metanfeta estrella de la UFC de vagabundos.
Gran parte de la magia de la serie esta ahí, en como Spencer y Lieber llevan todo al limite de lo absurdo y crean personajes que son caricaturas que van al limite.
Por su parte Mac aunque en un principio tiene una vida mas tranquila pronto tendra que enfrentarse a sus propios problemas que amenazaran no solo su relación Pretzels si no la vida del mismo, dando un final entre triste y delirante.
A mi modo de ver la serie sigue en plena forma, no estamos ante la serie del año, pero si es una serie muy divertida, muy gamberra y transgresora y la cual es una maravilla leer y desconectar de todo por un rato. Sus imposibles personajes navegan siempre entre la corrupción, locura, violencia, perversión y estupidez, pero tienen algo que hacen que te caigan bien.
Ahora a esperar que Norma saque el tomo 3.