Me pasa mucho últimamente. Estoy leyendo cómics de mutantes, y cuando llega la turra de las páginas con letras, lo cierro y no lo vuelvo a abrir en un mes. De verdad, este coñazo supremo, está matraca interminable, tiene que acabar.
El problema está en que yo concibo ya los cómics de pijameo como un entretenimiento pasajero. No me apetece leer a alguien dándome la chapa con fanfics de letras tachadas para que luego lo que me cuente no valga para nada. Porque esa es la sensación. Puro fanfic. Cuando sólo lees letras te das cuenta más todavía del gran engaño. Con los dibujos, incluso aunque sean malos, comulgas con ruedas de molino si hace falta. Con las páginas de letras el espejismo de rompe, y es cuando caes en la cuenta de que estás leyendo cosas que ha escrito un juntaletras al que se la suda la franquicia. Es más, sabes que probablemente el editor mutante de turno casi haya leído menos cómics de mutantes que tú
Por eso será, tal vez, que la franquicia mutante me parece que está en sus horas más bajas en mucho tiempo.
Yo creo que ya hemos tenido suficiente paciencia.
O tal vez es que con la edad me convierto en pitufo gruñón. Pero de verdad, con toda sinceridad, qué coñazo leer series mutantes actuales.