Pues leídos ya los dos tomos seguidos de Exiliados, sí que es verdad que la serie se queda en poco.
El dibujo de Rodríguez es una absoluta maravilla, y de hecho el tomo cuenta con unos dibujantes espectaculares. Pero la historia daría para mucho más, y simplemente cumple. Me quedo con el segundo tomo, que fue el que leí en su día, porque es el más divertido, con las versiones de Las mil y una noches, o el Oeste de Magneto.