He leído el séptimo Omnigold de los 4 Fantásticos: ¡Los 4 Terribles contraatacan!
Y aquí se puede percibir el gran bajón de la colección.
No es que sea un material malo ni repudiable, ni nada parecido, pero viniendo de donde venimos resulta una rascada de nivel cuanto menos muy perceptible. Y es que Conway, con muerte de Gwen o sin ella, fue en el mejor de los casos un guionista muy discreto.
Hay personajes desvirtuados hasta la extenuación, empezando por una Sue Storm muy asesinable (¡Byrne, socorro!) y continuando por el resto del cuarteto. Muchas de las nuevas incorporaciones, como Thundra, son cansinísimas. Medusa se libra de la quema y, al margen de sus sonrojantes intervenciones en combate, cumple su rol en el grupo de forma bastante competente.
Tramas, acción, desarrollo... Meramente aprobables. Un tomo que se queda en lo cumplidor y no sorprende en absoluto. La colección sigue siendo digna, pero ya no es "el mejor tebeo del mundo". Nada dura eternamente y, como dirá Reed Richards casi 50 años después, "todo muere".