Biblioteca Marvel Capitán Marvel #4 y
Clásicos Marvel #1-4 (Guerra Kree-Skrull)Sigo con mi expedición por la vida de
Mar-Vell con un tomo que es una amalgama enorme de autores y estilos.
Empezamos terminando (qué ironía) la etapa de
Thomas y
Kane y la batalla con
Hulk. Un tebeo entretenido que destaca sobre todo porque muestra el espíritu guerrero sacrificado del Capitán Marvel, quien pese a saberse completamente inferior a Hulk no cesa en sus empeños por detenerle. Me ha gustado que Rick defienda a los estudiantes sublevados cuando Banner los repudia a la primera.
Continuamos con una historia bastante tonta de
Namor a cargo de
Thomas (otra vez) y dibujada por el siempre competente
Sal Buscema. Nada reseñable en ella, argumento y resolución típicos.
Ahora toca un salto a la
Guerra Kree-Skrull que he dado para poder llegar a todos los recovecos de la historia de Mar-Vell. Es una historia con un ritmo verdaderamente incierto, en algunas ocasiones se detienen de manera excesiva sin sacar nada realmente importante ni sustancial y en otros momentos la acción transcurre de manera atropellada y sin profundizar en ciertos hechos. El ejemplo más claro es a partir de la aparición de la
Mente Suprema Kree y la actuación de
Rick Jones. Todos vemos lo que pasa pero... lo dejan un poco todo como cogido con pinzas. Aún con todo es una saga que no aburre y tiene grandes derroches de imaginación e incluso épica. Lo mejor de todo, el apartado artístico, con
Adams y
John Buscema, dibujos para enmarcar. Como fallo, el Capitán utiliza el Uni-Rayo para escapar de sus grilletes cuando hace tiempo que ya no lo lleva.
Tras la Guerra, volvemos al
Captain Marvel #22 a cargo de
Conway. Una historia que se deja leer, nada del otro mundo, pero por lo menos no es tedioso. Un villano de opereta de nombre
Megatón con motivaciones que no quedan claras, demasiado poder y un diseño bastante ridículo. Esta vez el dibujo corre a cargo de
Wayne Boring, al que no conocía, pero que me ha gustado moderadamente con ese toque más clásico. Curiosamente este número me ha recordado al tono de la serie original de
Nova, esto es curioso porque el siguiente capítulo está escrito por
Marv Wolfman, autor de la serie anteriormente mentada. Finaliza la trama de Megatón, alterando su origen para poder introducir un elemento necesario... las Nega-Bandas. El último número pre-Starlin no estoy seguro de si está escrito por Marv Wolfman o
Mike Friedrich, ya que el primero figura en la primera página del cómic y el segundo figura en el índice. Sea como sea, la trama no deja de ser del montón y destaca por el cambio de entitador;
Ernie Chan, que con los lápices de Boring me gusta mucho más por ese tono más oscuro que consiguen. Sí, son tres números que no destacan para nada, y que dependiendo el momento en que los leas se pueden hacer cuesta arriba, pero aportan una cosa que ansiaba desde hacía mucho; los poderes fotónicos de Mar-Vell, por fin, estaba harto ya de los poderes mainstream y que cada vez tenían una repercusión distinta.
Y la luz al final del camino...
Starlin. Todo el doloroso (en su mayor parte) camino seguido hasta aquí ha sido esperando este momento (y el final). Ya en su primer número (
Iron Man #55) presenta a
Drax,
Mentor,
Titan,
Thanos y los
Hermanos Sangre, de una manera muy dinámica. Una historia autoconclusiva que deja con ganas de más y que demuestra ya un nivel de calidad reseñable. El dibujo de Starlin me gusta bastante pese a no ser nada excepcional, y sobre todo me encanta el aspecto que le otorga a Thanos, mucho más tétrico que otras apariciones suyas, como por ejemplo,
Aniquilación.
Finalmente, el primer contacto entre Starlin y Mar-Vell, el
Captain Mar-Vell #25. Me ha gustado bastante, pero lo he visto por debajo que el anterior número. Pese a ello, parece que es el principio de algo importante.
Seguimos al borde del precipicio.