Os pone nerviosos porque su componente homoerótico os confunde, y eso os hace sentir desorientados y agresivos.
A los hombres de verdad que tenemos clara nuestra orientación sexual, para una acera o para otra, como Puño y yo, no nos provoca ese efecto, por eso estamos tan tranquilos. Y vosotros también lo estaréis una vez cojáis la cuchara.
Warren es ese julai que parece sacado de una portada de Danielle Steel que os hace cuestionar vuestra identidad. El bocadito de Alfaro. Ese culito que no podéis dejar de mirar:
¡Merendad!