Realmente es la auténtica némesis de Hank Pym. Y es que después de una serie de enemigos de poca trascendencia o un poco irrisorios, llego este personaje que se planteó como su igual científico, creándose una enemistad enconada que continuó con el paso de los tiempos. Creo que fue Stern durante su etapa al frente de los Vengadores el que supo darle es punto que le faltaba al villano para intensificar su faceta más amenazadora y convertirse en alguien que verdaderamente hizo mella en su adversario. Un personaje interesante, a pesar de que tuvo el pequeño hándicap de nacer en una época donde no todos los autores que lo utilizaron supieron hacer gran cosa con él, aunque tenía mucho potencial, como demostró el propio Stern.