Nunca he entendido las filias y fobias llevadas a ciertos niveles en los que algunas personas ven fantasmas donde no los hay, hasta el punto de mantener que existen complicadas y fantasiosas tramas empresariales en las que los medios están comprados, la crítica es partidista e interesada y hay una especie de complot para decidir qué vale y qué no. Todos sabemos que el marketing existe, y que la publicidad potencia o destruye, pero en último término, el público es soberano y no creo que nadie tenga interés en decir que algo es genial cuando en realidad piensa que es una mierda. No creo que haya más de lo que es: productos bien hechos que funcionan y productos que no.
Esta guerra Disney VS DC (VS FOX VS lo que sea), como si unos fueran el malvado imperio, y los otros los valientes rebeldes, me parece que la lleváis a terrenos que rayan la obsesión y que no tienen mucho sentido.
Creo que nadie se quejaba cuando las mejores películas del género de superhéroes eran de Warner, y Fox y Marvel Studios no le llegaban ni a la suela al murciélago... (no solo con Nolan; en los 90 Batman ya goleó cualquier intento Marvel de nada).