Punto número 1, Que El Topo sea una cosa jodidamente rara con posible cierta calidad no me hace lanzarme a verla enseguida cuando hay obras maestras del cine que no he visto aún, aunque la veré. Algunos no nos lanzamos de cabeza a ver toda obra cuyo creador afirme ser mago, Ibaita.

Punto número 2, el cine coreano ya no es ni siquiera una rareza o de gafapastas, eso pasó hace mucho, ahora es cine muy convencional y extendido, pero claro, el surcoreano. Txemita se la saca nombrando una peli norcoreana, respect.