Claro, la película en sí no se puede calificar de fracaso. Pero por otra parte que sus productores esperaran llegar a unos niveles desorbitados que no han llegado también. Superman y Batman ¿juntos? éxito asegurado.
El tema es ese. Normalmente las productoras hacen una estimación de que esperan sacar con una película en función de los actores contratados, la inversión en producir la película y el genero/temática de esta. Cualquier cosa que quede por debajo de esa estimación es un fracasao, aunque recuperen lo invertido.
En este caso las apuestas estaban muy altas, con dos personajes icónicos compartiendo pantalla por primera vez, con actores de bastante caché, con una película dentro del genero de moda y con una inversión enorme en el desarrollo y promoción de la película.
Habían tirado tan por alto que poco antes del estreno salió un estudio de unos matemáticos que le daba un 32% de probabilidades de exito, no porque hubiera pocas posibilidades de que funcionase la película, sino porque cualquier cosa que no fuese arrasar sería considerada un fracaso. Y es lo que pasó.
No solo no arrasó, sino que tubo una recepción más o menos tibia, quedando muy lejos de cualquier espectativa de los productores.