Esta clase de excusas hace unas cuantas décadas habrían sido más fáciles de colar, pero ahora, con un medio de información tan rápido como Internet, en el que enseguida te pones en contacto con quien sea y en el que las empresas están más al descubierto que nunca para sus clientes, cualquier mentira te la pillan en un tiempo récord y lo único que haces es ganarte mal nombre (más, quiero decir).
No se me ocurre ninguna razón de peso para que un comercial de SD soltase semejante chorrada, salvo que ni él mismo tenga muy claro cómo funcionan las cosas en su empresa.