"Cinema Paradiso" es un artero producto destinado a tocar el corazón de las personas de bien y para ello ataca sin piedad con toda la artillería disponible. Tenemos:
- la historia de un niño entrañable que queda huérfano a muy temprana edad;
- un pueblecito de ensueño en el que todos se conocen e incluso el vagabundo oficial cumple con cierta función social;
- una banda sonora bellísima, magistral y evocadora;
- la amistad del pequeño Toto con un sabio hombre mayor que le enseña la magia del cine;
- una conmovedora y paradójica desgracia que se ceba sobre este hombre;
- un bonito final aleccionador;
- uno de los cortejos amorosos más absurdos y babosos de los que se tiene recuerdo, totalmente propio de un inexperto pagafantas en lugar de un hombre hecho y derecho que intenta seducir a la mujer que ama; no intenten hacerlo en casa, es pura ciencia ficción.
Sin embargo, a mí me convencen la banda sonora, la fotografía, algunas icónicas imágenes, el explícito homenaje al cine del final, y la parte inicial. Pero vamos, a la película se le ven las costuras, las puntadas y hasta el nombre de pila de la costurera. Como film simpático, sí. Como gran película, no da la talla. Se queda lejísimos.
Saludos
.
Tú no tienes corazón ninguno

Conste en acta que el acusado
Morgan, se ha atrevido a mirar bajo la falda, por dos veces consecutivas, de las víctimas,
"The Artist" y
"Cinema Paradiso", dejando claro que es un asesino en serie de los sentimientos, masacrando películas bienintencionadas pero de sentimentalismo obvio, que buscan la empatía y lágrima del espectador sin tapujos.
Se teme por
"La invención de Hugo" -aunque esa ya me da más igual

-, y no se descarta que empiece a atacar víctimas más propiciatorias, como
"La vida es bella" o la filmografía de Edawrd Zwick.
Dejo en manos del jurado, la condena de este hombre, antes de que siga matando gatitos.
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¡Es que estas pelis no se analizan, leñe!

Sí, son prefabricadas, se les ve el plumero, se sabe lo que buscan. Agradar, conmover, sensibilizar. ¿Es algo deshonesto? Un poco, sí, pero en ocasiones como esta, la intención es sincera, y detrás hay un trabajo de calidad y un homenaje sentido, que usa la vía de una película notable, bien hecha, aunque ni mucho menos perfecta. ¡Pero nos homenajean a nosotros! A los amantes del cine. Al séptimo arte y todas las vidas que ha tocado. Eso tiene que conmover sí o sí. Hay obras de arte más puras, claro, como 8 y medio, pero son más artísticas y cerebrales. Oníricas, etéreas, simbólicas. En estas películas en cambio tenemos sentimentalismo -no diría barato- a borbotones, y películas hechas expresamente para conectar con el espectador -de nuevo; no como en los ejemplos sangrantes que van a por tu lagrimal con panfletos o sucias mañas-.
Quiero decir: ¿Imperfectas? Sí ¿Hermosas? ¡También!
Cerremos los ojos al crítico que llevamos dentro y limitémosnos a sentirlas, a sonreír con el protagonista desfasado de The artist, a animarlo, a sentir verdadera compasión por él, a disfrutar de su sonrisa de galán, a querer a ese perro y su lealtad a su amo. Disfrutemos con Cinema paradiso, y su pequeño cineasta, los escupitajos desde el palco de la clase burguesa, los funcionamientos del pueblo, y la inocencia e ilusión de la juventud.
