He leído
MG Los Nuevos Mutantes: Nueva Roma.
En este tomo llegamos al primer año de colección, donde Claremont apuesta por su sello más característico, el mismo que hizo triunfar a la Patrulla-X.
Es curioso, porque quizá podríamos hablar de repetición de esquemas o de explotación de recursos, sin embargo la serie mantiene cierta frescura, a pesar que reutiliza el concepto que creara Stan Lee junto a Kirby.Aunque está muy claro que tiene un lavado de cara importante.
Claremont tiene dos puntos fuertes a los que saber sacar mucho partido en esta serie: el primero es el desarrollo de personajes.
A pesar de la unidad como grupo, de los mismos uniformes y toda la parafernalia que nos recuerdan a los inicios de la Patrulla X, el autor dota a cada uno de los personajes de una personalidad remarcada, cuya individualidad repercute en la convivencia del grupo.
Esto que para algunos es una obviedad tremenda, no debe serlo tanto cuando tenemos series de grupo cuya coralidad es nula, o incluso el desarrollo de personajes no existe.
Aquí no solo es todo lo contrario, sino que además los hace mejorar, controlar sus poderes y en definitiva evolucionar.En pocos números tenemos a Rahne cuya educación la tiene demasiado marcada, mostrando una personalidad que es todo lo opuesto a la manifestación animal de sus poderes.
Roberto es quizá sobre el que más atención recae ya que conoceremos mejor a su familia y su trágico final como tal.
Danielle demuestra ser una cándida joven, cuyo valor es us máximo exponente; Sam consigue controlar algo mejor sus poderes, además de mostrar esa personalidad arquetípica del modesto chico de campo estadounidense.
Quizá Karma
Sorry but you are not allowed to view spoiler contents.
A parte tendríamos muy bien expuesta la convivencia entre todos ellos, transmitiendo muy bien todas las sensaciones y emociones típicas de los adolescentes.Los enamoramientos estarán a la orden del día, lo que nos traerá por añadidura los celos, aunque como es normal lo tendremos todo salpicado de inseguridad en ocasiones y un valor poco meditado.Pero por encima de todo un fuerte sentimiento de amistad; una amistad fiel y verdadera.
Sin duda el otro punto fuerte de Claremont es su capacidad de planear tramas a un largo plazo, además de ir moldeando un cosmos mutante a su antojo.Estoy convencido que a estas alturas el autor estaba disfrutando plenamente de su trabajo, algo que se trasmite muy bien en estas historias.
Retoma cuestiones que se dieron al inicio de la serie y que motivaron en parte la unión del grupo, de forma que
Sorry but you are not allowed to view spoiler contents.
pero una de las cosas que me ha llamado mucho la atención, y que apenas recordaba, es que Claremont fue el principal artífice de la unión del samurai de Plata y Víbora una alianza que aunque no haya sido especialmente sólida si que se ha recuperado en algunas historias en los últimos tiempos.Todo nace de Claremont, que además nos conecta con la primera mini serie de Lobezno, Honor, coescrita con Frank Miller.
Y es que no cabe duda de que la franquicia mutante va cobrando forma y la unión con la serie hermana es cada vez más patente.De hecho la participación de Kitty Pryde es uno de los primeros indicadores, aunque en el próximo tomo seguiremos viendo algunos más.Sobre todo si nos fijamos bien en el amigo informático de Kitty.

Pero realmente lo que más me ha gustado es la planificación del autor, algo que destaca más viendo algunas cosas con la perspectiva que da conocer el futuro de algunas tramas.
Aquí tenemos la presentación de dos personajes importantes, el primero es Selene, cuya afiliación al Club Fuego Infernal la colocará en una posición importante, y es que este grupo permanece en un importante segundo plano en esta serie.
El siguiente es una nueva incorporación al grupo, que como no es una chica, Magma.
La debilidad por los personajes femeninos de Claremont es más patente que nunca en esta serie.

Magma y todo lo que rodea a sus orígenes supone una de las ideas más frescas e interesantes de la serie hasta el momento.Es cierto que no es un concepto nuevo, pero introducido en este microcosmos si que lo es, además de que tendrá su importancia más adelante.
Finalmente le dedico mis últimas palabras a Sal Buscema, cuyo trabajo entintado por Bob Mcleod me ha gustado mucho.Aquí podemos ver como a pesar de sus limitaciones técnicas es capaz de realizare algunas viñetas que rozan la brillantez, algo que ya se pudo ver en el cruce de los Vengadores con los Defensores.
Posteriormente con el entintado de Tom Morgan pierde algo de fuerza, aunque a mi me sigue gustando igual, pero sinceramente ya no es lo mismo, por desgracia.
Como conclusión diría que es un tomo imprescindible para los seguidores de los mutantes y que supone un spin off de una calidad suprema que complementa muy bien la edición de lo OG, aunque para mi tiene calidad de sobra como obra autónoma.
Desde luego así da gusto volver a leer a los mutantes.
