He leído
Imposibles Vengadores Nº 18.
La verdad es que hay poco que comentar en este número:
Cada vez me gusta más el trabajo de Daniel Acuña.
Un número lleno de acción y con un ritmo trepidante que nos acerca a un final que dependiendo del número se men antoja más lejos o más cerca. En algunas ocasiones, tengo la sensación de que la historia se ha alargado demasiado; en otras, disfruto mucho del número. En esta ocasión me encuentro en un punto intermedio, porque me lo he pasado bien con tanto enfrentamiento, pero al final me esperaba alguna conclusión, o algo similar. Parece que ahora solo falta un número para ver el desenlace.
Por lo demás, el Sport On de Julián es muy exacto en destacar como entre pelea y pelea, tenemos ese desarrollo de personajes o relaciones al que nos tiene acostumbrado Remender en una serie tan coral como esta. Y, que queréis que os diga, a mí eso es algo que me gusta mucho. Una buena forma de combinar la acción con el avance de la trama, aunque en este número sea poco.
En el próximo número, veremos si el largo viaje hasta llegar aquí ha merecido, o no, la pena.