Buenas

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"American Pie: Reencuentro" me hizo pensar bastante más que la mayoría de propuestas de la temporada teóricamente más profundas.
Planea ligeramente sobre el paso del tiempo, los viejos amigos, los primeros amores que se olvidan, los desvanecidos sueños de juventud, el miedo a la madurez, la precariedad laboral, las apariencias sociales, los amores frustrados, la rutina sexual del matrimonio... todo ello desde un punto de partida tan sencillo como efectivo. Es cierto que el film nunca toma conciencia de sus posibilidades, pero no deja de resultar paradójico que un artefacto decididamente superficial consiga acariciar objetivos que otras películas infinitamente más pretenciosas jamás soñarían.
Se echan de menos los grandes momentos de las primeras entregas, algún gag memorable, y un guión más trabajado. Sin embargo, viniendo de dónde veníamos ("American Pie 3), ésta secuela final (al menos moralmente) se descubre como aceptable y consigue cerrar el círculo. Supongo que en una saga tan generacional como ésta, todos los que en su momento disfrutamos de las aventuras de Jimbo y compañía, pasaremos un agradable rato frente a la pantalla conociendo las nuevas peripecias de estos adultos adolescentes. El resto, que se abstenga, o al menos no simulen no saber a qué venían.
Saludos

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