Pues ahí tenemos la explicación
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Precisamente el punto débil del anterior coleccionable era su caótica distribución, que era exclusivamente de kiosco aunque también llegase a las librerías: y ahí estaban los retrasos, que todos recordaremos, las diferentes fechas de llegada a los puntos de venta dependiendo de la ciudad o la imposibilidad de conseguir números atrasados.
Afortunadamente, este coleccionable está más y mejor orientado a las librerías, con la distribución para éstas a cargo de la misma empresa que lleva el resto de comics de Panini. A efectos prácticos, para las librerías el coleccionable es un producto más de Panini, como cualquier grapa mensual o cualquier tomo, con la salvedad de que sale cada quince días.