God of War, la trilogía.
Un general espartano al frente de 50 hombres consigue destacar por su audacia y su estrategia, haciendo crecer sus filas hasta el punto de llegar a miles de soldados con los que combatir. Sin embargo, sus peores enemigos, los bárbaros, tampoco andaban escasos de hombres... ni de fuerza. Indomables, los bárbaros eran un desafío para Kratos, que empleó métodos cada vez más sangrientos para acabar con sus enemigos, llegando a quemar aldeas y matar a niños y mujeres. Sus hazañas eran contadas con horror por todo el mundo, y su nombre temido por todos los guerreros. Por todos, menos por los bárbaros.
Kratos se enfrentó definitivamente a esa incansable tribu en una gran guerra. Para desgracia del espartano, sus hombres no eran rivales para las terribles filas del enemigo. Viendo como caían todos sus soldados, e indefenso ante el ataque del capitán bárbaro, llamó en último recurso a Ares, dios de la guerra. Le ofreció su alma a cambio de que acabara con sus enemigos. Ares, consciente del poder de kratos y viendole un esclavo digno, cumplió con su parte, quemando al ejército rival y dándole poder suficiente y armas para acabar con su némesis.
Como un mero títere, Kratos hizo que su nombre fuera aún más temido y sanguinario, pues siguiendo las ordenes de Ares, y con su nuevo poder, no había pueblo o ciudad capaz de resistir. Todos caían ante la hoja de Kratos... todos... incluida su familia. Al ver con horror que había matado a su familia, Kratos decidió emprenderse en una épica venganza con un único fin: derrotar y matar a Ares, el dios de la guerra.
Con un argumento tan impactante empieza esta trilogía. Y es que el primer juego de GOW es sin duda eso: impactante. Un juego para Playstation 2 técnicamente muy superior a la mayoría de juegos del mercado, con un sistema de jugabilidad infalible (los cuatro botones dispuestos para ataque rápido, ataque fuerte, agarre y salto, las flechas para seleccionar magia, y L2 para usarla) y una cámara muy cómoda que acompañaba a la perfección los épicos escenarios, no había juego que pudiera considerarse su igual.
Pero claro está, a todo buen gráfico y buenos movimientos debe acompañarle un motivo por el que jugar... ya teníamos el ambiente (la antigua Grecia), ya teníamos los personajes (mitología griega) y teníamos la idea... ahora había que comenzar la venganza de Kratos contra Ares, que afortunadamente coincidía con su asalto a Atenas. Y como Zeus había prohibido a los dioses luchar entre si... hala, aliado al canto.
Atenea nos ayuda a encontrar la caja de pandora para acabar con Ares... pero claro, esa caja hay que conseguirla, así que la mayor parte del juego consiste en superar las pruebas del templo de Pandora. Y aquí tenemos otro de los puntos fuertes y característicos del Gow: los puzzles. Minutos... horas... incluso días puede pasarse uno intentando resolver el complicado rompecabezas que te plantean antes de poder pasar al siguiente punto.
El juego, un éxito. La segunda parte, muy esperada. Y como era de esperar, llegó con muchas mejoras con respecto al primero. Mejores gráficos sobretodo en secuencias ingame, escenarios más impactacantes... pero más fácil. Mucho más fácil que el primero en todos los sentidos: puzzles, enemigos y jefes finales.
Esta vez el juego nos lleva al templo de las hermanas del destino. Por lo visto, algo no fue como Kratos esperaba (no quiero destripar nada del final del primer juego, por si acaso) y Zeus le pegó una paliza ¿Cómo vengarse de él? Esta vez, a fatla de Ateneas, son los titanes los que ayudan a Kratos a cumplir su objetivo. En la gran guerra, Zeus exterminó a su especie, dejando a unos pocos como prisioneros y esclavos. Más aliados al canto (y esta vez espectaculares) y nuevo objetivo: llegar hasta las hermanas del destino para volver al pasado y evitar que Zeus pegue una paliza a Kratos.
El templo es aún más bonito que el de Pandora, con unas vistas espectaculares e ideas que no sé de dónde sacan. Pero por si el templo sabe a poco... ¡Viaje al centro de la Tierra! o lo que es lo mismo: Atlas. Y sí, es el mismo Atlas que conocemos, haciendo lo que sabemos que hace y con un tamaño que asustaría al mismísimo Odín.
En cuanto a jugabilidad, enemigos y demás... es prácticamente lo mismo que el primero, sólo que las magias y armas cambian, y en vez de tener poderes relacionados con los dioses (aliados del primer juego y enemigos en este), esta vez son los titanes.
Al final hay combates, sorpresas, más combates y más sorpresas que llevan al juramento de Kratos de vengarse y pronunciar su famosa frase: ''La era de los dioses ha llegado a su fin''. Con un final como este... ¿Cómo no podía uno esperar ansioso el final de la saga?
Sobretodo porque el tercer juego estaba previsto para la nueva generación, Playstation 3 y prometía ser muchísimo mejor que los dos anteriores en cuanto a apartado técnico se refiere. Como estaba previsto, salió para la tercera de Sony. Como estaba previsto, los fans no esperaron 3 minutos para comprarla (si todo el mundo la tenía 2 días antes de su lanzamiento y todo) y como estaba previsto, le ha dado mil patadas a los dos juegos anteriores en TODO.
Si el 1 y el 2 tenían buena jugabilidad, este lo supera con creces. Ahora aparte de las magias (que ya no se cambian con los botones de dirección, sino que están sujetas al arma que usemos en ese momento) tenemos objetos que arrebatamos a cada dios que matamos ¿Que matas a Helios? (ya destripado en la demo), pues tienes su cabeza y puedes usarla para encontrar pasadizos, cofres, iluminar zonas oscuras, aturdir enemigos... esos objetos no funcionan con orbes azules, sino una barra amarilla que se va agotando a medida que lo usas, y se va llenando sola tras usar el objeto.
Por si esto era poca variedad para alguno, también han incorporado más armas (5, de hecho, pero una de ellas sólo se usa en modo Ira del Kaos). Y hablando de incorporaciones, hay más referencias a la mitlogía que nunca, con personajes como los Tres Jueces, Hefesto, Afrodita, Hera, Heracles, Apolo. Junto a los personajes, se cuenta la mitología real, pero ligeramente adaptada al juego. A los que conocen la mitología les puede sacar alguna sonrisa ver cartas de almas torturadas en el Hades (que por cierto tiene un aspecto en cada juego), la historia de Hefesto, los tres jueces... aunque deben olvidar antes todo lo que saben en cuanto a Kratos. A los que no saben mucho de mitos griegos les puede ayudar a aprender.
Aparte de la nueva jugabilidad y más armas, en este juego los escenarios se salen... o al menos se mueven. Si en el 1 nos subimos a la espalda de Kronos (que casi no se ve) aqui caminamos por todo su cuerpo (interior y exterior). Si en el segundo tenemos a Atlas, aquí vamos de Titán en Titán, observando como se mueven de fondo mientras luchamos, o notando sus movimientos en el escenario.
En cuanto a puzzles... bueno, lo de los puzzles es un tema un poco complicado. En un principio, este juego se basa más en la habilidad para saltar, trepar, volar o caer en picado que en los puzzles. Lo que son las pruebas de habilidad están muy conseguidas, pero se echa de menos estar tres horas ante un jardín. Eso sí, cerca del final hay más puzzles y cada cual mejor que la anterior. El puzle del jardín de Hera es el mejor que he jugado hasta ahora, aparte de ser el más novedoso.
Y luego está ese final. Si de esos tres juegos no te ha gustado nada... que ya debes ser raro... el final desde luego te gustará... y es que en un juego así lo único que faltaría además sería una sorpresa final (o varias) y en este caso, tenemos la guinda del pastel, o lo que es lo mismo, un juego perfecto.
Nota: 10/10